Festejos y sismos
El mes de septiembre ha sido muy significativo en la historia de México. No hay mexicano que no tenga presente este mes, no sólo por los festejos conmemorativos de la independencia nacional del imperio español, sino por las tragedias que han ocurrido a lo largo del tiempo reciente. El terremoto del jueves 19 de septiembre de 1985 –y su intensa réplica un día después–, se registró a las 07:19 horas y alcanzó una magnitud de 8.1 grados.
El epicentro se localizó en el Océano Pacífico mexicano, cercano a la desembocadura del río Balsas, en la costa del estado de Michoacán. Este fenómeno afectó en la zona centro, sur y occidente de México, en particular a la capital del país. Ha sido, desde entonces, el más significativo y mortífero de la historia, pues superó en intensidad y daños al registrado en 1957, que hasta entonces había sido el más notable en la ciudad.
El sismo de septiembre de 1985 y sus múltiples réplicas que se prolongaron has- ta el mes de octubre, arrojaron una cifra no oficial de poco más de 12,500 muertos, más de 20 mil heridos y daños materiales estimados en su momento en más de 8 mil millones de dólares, 250,000 personas sin casa y 900,000 tuvieron que abandonar sus hogares. La remoción de escombros se siguió llevando a cabo hasta diez años después y aunque usted no lo crea aún existen campamentos derivados de ese suceso.
Ahora, 32 años después, nos volvemos a encontrar con un sismo. Una veintena de municipios de los estados de Chiapas y Oaxaca fueron los más afectados por el sismo de 8.2 grados, el más intenso en la historia moderna del país, registrado la noche del 7 de septiembre pasador a las 23:49 horas. Y aunque las autoridades de los tres niveles de gobierno todavía evalúan la magnitud de los daños, el saldo hasta este momento ya es catastrófico: 96 muertos, 76 en Oaxaca, 16 en Chiapas y 4 en Tabasco. Los daños materiales se están toda- vía evaluando pues se está realizando un censo para conocer la magnitud de la tragedia.
Pero Septiembre es también un mes muy significativo, pues los atentados árabes del 11 de septiembre de 2001, modificaron la forma en que se hacía periodismo. Gracias a la tecnología, mucha gente vivió angustiada esos atentados, que fueron seguidos por la televisión varias horas. Fueron, si mal no recuerdo, una serie de cuatro atentados terroristas suicidas cometidos por 19 miembros de la red yihadista Al Qaeda en diversas ciudades de Estados Unidos, mediante el secuestro de aviones comerciales para ser impactados contra diversos objetivos, causando la muerte de alrededor de 3,000 personas y dejando a otras 6,000 heridas, así como la destrucción de todo el complejo de edificios del World Trade Center en Nueva York – donde estaban las Torres Gemelas–, así como graves daños en el edificio del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, en el estado de Virginia, episodio que motivaría que el gobierno estadounidense y sus aliados europeos iniciaran una “guerra contra el terrorismo”. Felipe Calderón inició su guerra en contra del crimen organizado y analicen cómo nos ha ido.