Scherer, Nieto, Gertz… los dueños de los secretos
Todos en el poder los saben: Hay funcionarios, colaboradores, asesores, influyentes y súper poderosos. No es lo mismo ser secretario de equis dependencia, asistente de ocasión al sermón de la mañana, a estar siempre al lado del presidente. Quienes van a Palacio y, con discurso oficial o entrevista, dan noticias de primera plana. Y aunque poco hable a la prensa, el principal de todos es Julio Scherer Ibarra, consejero jurídico de la Presidencia. A él acuden todos, perseguidos o no, temerosos o no, ambiciosos de grandes cargos o gobernadores interesados en gestionar recursos para sus estados. Siempre tiene respuesta… y solución. Hombre de palabras directas –“yo hubiera sacado a Elba Esther Gordillo de la cárcel en dos patadas”, me dijo tras la detención de La Maestra- no juega a ocultarse. Habla de frente, escucha, ofrece, arregla y, lo fundamental, respeta el compromiso en tiempos y en formas con sus interlocutores. LOS AFANES JUSTICIEROS En segundo lugar está Santiago Nieto. El titular de la UIF tiene a su cargo los asuntos más caros a Palacio. Recibe encomiendas, informa de avances, difunde investigaciones y consigna casos, aunque a veces su protagonismo lo lleva a la polémica. Es, con base a la instrucción superior y la conducción de Julio Scherer Ibarra, mano en la persecución de corruptos del pasado. Quién sabe cómo le haga para indagar tanto, pero en sus manos están cientos y cientos de expedientes de noticias actuales y futuras. Ya lo sabemos, de momento el caso más espectacular es el del gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, pero hurga a tótems del priísmo, del panismo, de dirigentes políticos, del empresariado y hasta de deportistas. Luego viene el fiscal Alejandro Gertz Manero, hombre de ponderación ante los ímpetus justicieros de la 4t. ¿Por qué todo esto? Porque el régimen va a ajustes de cuentas mayores. Escándalos en víspera electoral y con secuelas en el segundo trienio del sexenio.