ZABALETA DESCUBRE EL LADO PÍCARO DE MOZART
La soprano participa en Por siempre Amadeus, que se presenta hoy en el Auditorio Nacional
El “Réquiem en Re Menor, K. 626”, la última obra del gran compositor austriaco, Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791), quedó inconclusa luego de que la muerte lo sorprendiera en pleno acto de creación. Se trata de una composición musical que se canta con el texto litúrgico de la misa de difuntos católica.
“Mozart es uno de los autores más importantes y divertidos en la historia de la música, fue como un rockstar de la época. Su música es magnífica y es para todos, pues puede captar cualquier tipo de público, desde el infantil hasta el experto”, señaló el director escénico, José Olivares, quien coordinará a más de 200 artistas en el escenario del Auditorio Nacional de la Ciudad de México, donde se presentará el espectáculo Por siempre Amadeus. Réquiem de Mozart.
Con la participación estelar de de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN) —bajo la dirección de Carlos Miguel Prieto—, la Compañía de Danza Contemporánea de Cuba, el bailarín estadounidense Rasta Thomas y la soprano y actriz mexicana Susana Zabaleta (quien interpretará la “Introducción al Réquiem”), el magno espectáculo nos muestra a un Mozart en su lecho de muerte, mientras escribe su última obra inspirado en los mejores pasajes de su niñez y adolescencia.
“Mozart hizo una obra como nunca, por lo que con este espectáculo México le retribuirá como un regalo al mundo. Se trata de ofrecer una producción que demuestre que estamos en contra de la muerte que genera la violencia, por eso será la primera vez que se vea un Réquiem de Mozart con danza, música y teatro”, resaltó Olivares en entrevista.
Con una escenografía espectacular, pantallas de leds e increíble iluminación, el espectáculo estará divido en tres partes: una introductoria con el Órgano Monumental del Auditorio Nacional (OMAN), interpretado por Víctor Urbán, con las obras “Fantasía en Fa Menor” y “Divertimento No. 33”, piezas que compuso Mozart a los nueve años de edad. Además, estará acompañado por los 60 músicos de la OSN.
En la segunda parte, la soprano mexicana, Susana Zabaleta, interpretará cuatro arias de Las Bodas del Fígaro y Don Giovanni, en italiano, para representar la juventud creativa y atrevida de Mozart. “Para quienes no han tenido la oportunidad de acercarse a la música clásica, este es un gran momento para llevar a sus hijos y mostrarles que no todo es música de banda ni reguetón. Creo que es muy importante educar al oído, porque es un regalo que nos puede llevar a sentir cosas totalmente distintas de las que hemos sentido”, expresó Susana Zabaleta, por su parte.
“Voy a participar con unas arias de Mozart que hablan de lo sexual que era, porque en su época era todo un rockstar y todos querían cantar sus canciones. Esta vez será una prestación tremendamente pícara, con arias sobre cómo enamorar alguien. Realmente, será muy fácil entenderlas, pues habrá una pequeña explicación previa sobre
Para quienes no han tenido la oportunidad de acercarse a la música clásica, este es un gran momento para llevar a sus hijos y mostrarles que no todo es música de banda ni reguetón”
Susana Zabaleta Soprano
lo que se está hablando y de dónde viene la ópera”, comentó Zabaleta.
La última parte y el broche de oro del magno espectáculo será el Réquiem de Mozart, donde los 50 bailarines de la Compañía de Danza Contemporánea de Cuba, encabezados por Rasta Thomas, tomarán el escenario del Auditorio Nacional, junto al coro Enharmonia Vocalis con sus 60 cantantes especialistas y quienes, además, estarán acompañados por la soprano Anabel de la Mora; la mezzosoprano Guadalupe Paz; el tenor Víctor Hernández; y el barítono Enrique Ángeles.
“Mozart hace un homenaje por medio de esta pieza sensacional a las personas que se van, pero regalándoles esa divinidad con la que pueden regresar a la vida. Es por ello que su música es un ciclo de vida y eso es lo que vamos a festejar en éste show, es decir, que estamos en contra de la violencia, a favor de la vida sana y de la muy buena música que este autor nos regaló”, señaló Olivares, quien calificó al “Réquiem” como la pieza más importante de compositor austriaco, pues se trata de una obra “terriblemente sublime”, que invita a quien la escucha a seguir viviendo y tener respeto por la gente que se va.