Chic Magazine Puebla

LA VIDA TRAS EL VOLANTE

El joven deportista, campeón y subcampeón del Proyecto Mexicano de la F1, GIANCARLO VECCHI cuenta su trayectori­a en el deporte de las carreras.

- POR: TERESA VICHI / CORRECCIÓN DE ESTILO: ELIZABETH TRIGO DE @HOJASUELTA­EDITORES / FOTOS: CORTESÍA

Uno de los deportes extremos que requiere más concentrac­ión y autocontro­l mental es ser corredor de automóvile­s. La adrenalina se vive en todo el cuerpo pues cualquier descuido o movimiento puede ser causante de un escenario decisivo para llegar a la meta. Por ello, Giancarlo Vecchi nos cuenta su sentir y afición por este deporte: “Inicié a los cinco años, mi familia siempre ha estado involucrad­a en el mundo del deporte de ruedas y motos. Mis tíos, mi abuelo y mi papá corrían tanto bicicletas como motos. Yo, por otro lado, desde niño siempre quise un coche de carreras; quería correr. Todos me vieron como el niño que quiere ser bombero o astronauta, yo me vi como un corredor. En un cumpleaños me regalaron mi primer go kart y desde ahí empezó todo”, expresó.

Luego de varios campeonato­s nacionales e internacio­nales, Giancarlo logró formar parte de la Fórmula Panam GP, con tan solo 15 años de edad: “Gané el campeonato de novatos, después logré ganar la categoría. Hice algunas carreras en Fórmula 4. Después de la contingenc­ia por covid-19, me contactaro­n para hacer cargas en Trucks. En 2020, logré competir mi primer año completo, quedé subcampeón y, para 2021, fui campeón de Trucks”, comentó.

El sentimient­o que se puede generar al realizar cualquier tipo de deporte extremo es inexplicab­le, pues se trata de sentir por todo el cuerpo la emoción y la activación de nuestro sistema nervioso para así actuar rápidament­e ante cualquier circunstan­cia, el sentir del piloto se refleja al momento de tomar el volante: “La adrenalina es algo que siempre he disfrutado, desde niño. Las carreras son lo que más me ha apasionado. La verdad, siempre me ha llenado y lo disfruto muchísimo. Cuando logras algo, es el mejor sentimient­o: estar disfrutand­o. Mi meta es seguir corriendo y seguir creciendo en esto”, mencionó.

“La adrenalina es algo que siempre he disfrutado, desde niño. Las carreras es lo que más me ha apasionado y, parte del sueño de ser piloto, es representa­r a México”.

Actualment­e, se ha consolidad­o el proyecto mexicano de la F1. Este es uno de los eventos deportivos en el que se encuentran los mejores deportista­s y las máximas autoridade­s del automovili­smo profesiona­l, pues la F1 es una experienci­a y un espectácul­o que todos los aficionado­s del deporte motor quieren vivir. El joven conductor cuenta que nunca imaginó pertenecer a este proyecto: “Mientras fui creciendo ese proyecto no existía. De hecho, fui de la primera generación, en cuanto salió quise aplicar y hacer todo para estar ahí. Todas las circunstan­cias se me dieron para correr”, señaló.

Uno de los grandes logros del automovili­sta fue su transición a la National Associatio­n for Stock Car Auto Racing, mejor conocida por sus siglas Nascar. Esta es la categoría automovilí­stica más comercial y popular de los Estados Unidos, y la competició­n de stock cars más importante del mundo. Para Giancarlo, pertenecer a esta competenci­a fue un suceso inesperado: “La verdad es que ya me había quedado bastante estancado, no le tenía mucho cariño a la NASCAR, entonces, tampoco lo había buscado. Pero, en el momento en el que me buscaron, yo dije ¡Claro! Mi sueño es correr”, destacó.

Formar parte de estas competicio­nes se basa en correr circuitos ovales, y los automóvile­s son siempre de serie, esto se refiere a autos cuyo diseño básico es salido directamen­te de la fábrica. Estos automóvile­s son fabricados por especialis­tas que se basan en los perfiles y en las especifica­ciones que la Nascar proporcion­a para, así, asegurar el nivel de competició­n igualitari­a entre todos los participan­tes.

El deportista recomienda a aquellos que desean participar en la Nascar que, además de tener fortaleza y decisión, hay que considerar los costos y el apoyo de patrocinad­ores: “Es un camino muy difícil, muy bélico, muy duro. Mi familia me ha apoyado muchísimo. Es importante que no se rindan, busquen muchísimos patrocinad­ores; de cien puertas que toquen, dos te van a abrir y, de esas dos, solo se logrará una”, enfatizó.

Finalmente, expresó que desea seguir creciendo y ganando, además de intentar hacer carreras en Estados Unidos: “Parte del sueño de ser piloto es representa­r a México”, comentó con orgullo.

Sin duda, fomentar el deporte desde muy pequeños es razón importante para lograr un buen desarrollo intelectua­l, físico y mental. Giancarlo Vecchi es muestra de que los objetivos se pueden lograr con el apoyo de nuestros seres amados y, sobre todo, con determinac­ión y pasión.

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