ATRÉVETE Y EMPRENDE
La clave del éxito en el acto de emprender está seguido de una serie de pasos que debes tener presentes e incluir en todas tus propuestas de negocios. Para lograrlo, debes hablar y hacer que tus ideas sean escuchadas.
Emprender para nada es asunto sencillo. Exige mucho más allá de los recursos financieros necesarios para arrancar el negocio. Requiere habilidades que tendrá que tener el emprendedor si quiere sobrevivir todas las dificultades que seguramente se le van a atravesar en el camino. No por nada cuando los inversionistas están evaluando la posibilidad de asociarse a un proyecto, el aspecto principal que analizan no es la idea sobre la que está fincado, sino quién la está echando a andar, es decir, al emprendedor.
Él o ella vale mucho más que cualquier proyecto genial porque de él dependerá en mucho que el negocio despegue o se vaya en picada.
“Emprender es un acto de valentía, de salir de la zona de confort y buscar hacer conocido lo desconocido, y esto es realmente un acto de valor en el que uno se arriesga para construir un puente hacia su destino y no transitar los puentes que ya otros emprendedores construyeron”, explica Juan Carlos Sánchez Gnecchi, emprendedor de varias empresas de tecnología, en su libro electrónico, Fortaleza mental para emprender. Así, entre lo que necesita está una mente fuerte para resolver todas dificultades que echar a andar una empresa conlleva.
Pero, ¿qué es la fortaleza mental? Es un concepto que no ha sido fácil de definir, pero que puede resumirse en: “la capacidad de regular tus emociones, manejar tus pensamientos, y comportarte de una manera positiva, más allá de tus circunstancias”, según explica Amy Morin, autora de varios best sellers al respecto y reconocida por el número de vistas de su plática TED sobre el tema.
TODO ESTÁ EN LA MENTE
Es importante tenerla porque no es ni el talento ni la inteligencia lo que lleva a la gente a triunfar, sino la fortaleza mental. “Las investigaciones están empezando a revelar que tu fortaleza mental, o tu determinación, juega un rol más importante que nada más para alcanzar tus metas en salud, negocios y la vida. Son buenas noticias porque no puedes hacer mucho acerca de tus genes, pero puedes hacer mucho para desarrollar tu fortaleza mental”, sostiene James Clear, un especialista en ciencia del comportamiento y autor de varios libros relacionados con este tema y hábitos y creatividad.
Para ejemplificarlo, Clear cita el estudio de Angela Duckworth, una investigadora de la University of Pennsylvania, y autora del libro El poder de la pasión y la perseverancia, que estudió a más de 2 mil cadetes al ingresar a la Academia Militar de Estados Unidos y encontró que la clave del logro no es el talento sino una mezcla de pasión y persistencia, lo que llamó “determinación”.
Al estudiar a estos novatos, encontró que aquellos que tenían mayores posibilidades de terminar ese brutal entrenamiento inicial, diseñado para probar su resistencia física, sicológica y mental, no eran aquellos más inteligentes, ni los que tenían más capacidad de liderazgo, sino los más determinados.
“En todas las áreas de la vida, desde la educación hasta el trabajo o la salud, es