YA SE VERÁ:
ENRIQUE DÍAZ INDICÓ QUE A PESAR DEL AMBIENTE DE INSEGURIDAD QUE SE VIVE EN TODO EL PAÍS LA SOCIEDAD NO DEBE DEJAR DE ALZAR LA VOZ Y PEDIR UN ALTO
La realidad de la violencia es que el crimen organizado sigue muy fuerte, no solo en Guanajuato sino en muchos estados del país, y suceden cosas que nos sorprenden, y aunque ya no es raro, no por eso tenemos que acostumbrarnos y dejar de alzar la voz para pedir un alto, señaló el obispo Enrique Díaz Diaz.
El prelado señaló que el trabajo de las autoridades será juzgado en las próximas elecciones.
“La ola de muerte nos va cobijando”, retomó de la procesión que hubo en el San Cristóbal de las Casas el pasado 25 de enero, y señaló que en el último encuentro del Consejo Permanente de las Provincia de las Diócesis, los obispos volvían a plantear el tema de la inseguridad y violencia, en donde cada uno decía que su provincia era la peor.
“Tenemos que seguir trabajando, autoridades en primer lugar, es su responsabilidad y no se vale echarse la bolita de que le toca a la federación, le toca al estado y al municipio, es responsabilidad de todos y de la sociedad civil”, indicó.
Consideró que más que juzgar el trabajo de una persona, como es el fiscal Carlos Zamarripa Aguirre, se tiene que reconocer que el crimen superó desde hace mucho a las autoridades y lejos de echarnos la culpa se tiene que estar conscientes de que se debe seguir trabajando y ese trabajo al final de cuentas será juzgado en las próximas elecciones.
En el caso de Guanajuato, aunque no se han visto comunidades que estén coartadas por el crimen organizado, sí es una realidad que muchas familias están dejando el estado porque tienen miedo del crimen y las autoridades.
Enrique Díaz OBISPO