Contraretrato
NO SE PUEDE NEGAR QUE LAS CONDICIONES EN LAS QUE ASUMIÓ LA NACIENTE COMISIÓN ESTATAL DE ATENCIÓN INTEGRAL A VÍCTIMAS (CEAIV) ERAN MÁS QUE ADVERSAS. A TRES AÑOS DE SU CONFORMACIÓN SIGUEN SIÉNDOLO. SIN EMBARGO, ESAS LIMITACIONES HAN MOTIVADO UNA OLEADA DE QUEJAS QUE YA LO COLOCAN EN SEGUNDO LUGAR DE QUEJAS PRESENTADAS ANTE DERECHOS HUMANOS.
Jaime Rochín del Rincón ha sido un funcionario que se ha habituado a administrar los escasos recursos que le otorgan. Si bien logró un incremento del doble en 2023 que se ha normalizado para este 2024, su presupuesto sigue siendo ínfimo frente a las diversas necesidades de las numerosas víctimas de la violencia en Guanajuato.
No se puede olvidar que su renuncia estuvo sobre la mesa de Libia Dennise García Muñoz Ledo como Secretaria de Gobierno. Ella misma tuvo que convencerlo de quedarse precisamente con la promesa de mayor apoyo, más allá de la declarada intención del gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo para proporcionarle mayores subsidios, sí así lo requerían.
Ahora ya con Libia como candidata a la gubernatura, no sería de extrañar que Rochín del Rincón se mantenga, por lo menos, en este cargo para el que ya ha desarrollado una piel gruesa, si tomamos en cuenta que tampoco tuvo un terso paso por la Comisión Nacional de Atención a Víctimas.
Por todo lo anterior, no debe extrañar que el titular de la CEAIV sea complaciente con sus subalternos que, envueltos en la euforia preelectoral, asistan y aplaudan eventos de la abanderada del PAN como su director de políticas públicas, capacitación e investigación Hugo Ricardez, quien hasta lo presumió en sus redes. Al final, la candidata fue, y podría seguir siendo, su jefa.