El guanajuatense liberal Ignacio Ramírez Calzada
Este 2024, conmemoramos el 206 aniversario natal del ilustre maestro y jurista sanmiguelense Ignacio Ramírez Calzada “El Nigromante”; nacido en San Miguel el Grande, hoy de Allende, el 22 de junio de 1818. Personaje principalísimo de nuestra historia patria, al ser ideólogo de la Reforma y redactor de las leyes de la Constitución de 1857; marco jurídico sobre el cual se edifican la moral y la identidad nacional del mexicano moderno, así como la equidad de género y la “conformación de una institucionalidad republicana en México”.
Ignacio Ramírez nació, durante el gobierno, de 1816 a 1821, del virrey de la Nueva España, Juan Ruíz de Apodaca, casi siete años después del fusilamiento y decapitación de Ignacio de Allende, ocurrido en Chihuahua el 26 de junio de 1811. En ese entonces, Ramírez fue bautizado dos días después de nacido, en la parroquia de San Miguel Arcángel que todavía ostentaba su antigua fachada clásica “sencilla con dos torres”, pues la actual pseudo-gótica fue posterior.
Ignacio Ramírez nació en el seno de una familia mestiza acomodada, pero modesta. Su casa se ubicaba distante del primer cuadro de la villa de San Miguel el Grande, ocupado entonces por la jerarquía de las familias españolas y criollas. El domicilio de sus padres, doña Ana María Guadalupe Sinforosa Calzada y don Lino Ramírez Galván, se localiza actualmente en la tercera cuadra de la calle de Umarán, en el centro histórico de San Miguel de Allende, Guanajuato. Sin embargo, debemos entender que la actual edificación pudiera no corresponder a los muros y techos de adobe donde nació este sanmiguelense. Además, con seguridad, en 1818 el predio citado abarcaba más extensión de tierra, pues era necesario el gallinero, el chiquero o espacio para el ganado, así como una superficie de huerta y siembra para consumo familiar. Y también debieron tener alguna caballeriza en la vivienda.
Adelantado a su tiempo, Ignacio Ramírez, “El Voltaire de México”, fue un americano congruente con las necesidades de equidad entre los mexicanos, por ello se erige como “Padre de la Patria”, en la misma estatura que Hidalgo, Allende, Aldama, Jiménez, Josefa Ortiz, Benito Juárez y demás liberales.
Su nombre está inscrito con letras de oro en el recinto legislativo federal y también en el palacio legislativo de Sinaloa. En su honor, el gobierno del Estado de México, donde vivió en su capital Toluca, decretó “2018 Año del Bicentenario del Natalicio de Ignacio Ramírez Calzada”.
Hoy, el mayor honor por ofrecerle, es leerlo y que su palabra se escuche nuevamente, por ello, se transcribe el siguiente texto, parte de su discurso cívico del 16 de septiembre de 1861, pronunciado al pueblo en la Alameda de la ciudad de México. Se conmemoraba entonces el 40 aniversario de la proclamación de independencia y 51 años del Grito de Dolores: ¡Estremécete, México, de alegría, ya tienes un héroe! Pero ¿qué cosa es un héroe? Es el hombre que sabe que el derecho de morir se compra con grandes servicios a la humanidad, (…) es el hombre que sabe que las naciones nacen en una victoria; y si sucumbe, es el Satán que lucha todavía, porque el edén de las sociedades es el progreso, y si la espada de un ángel defiende el paraíso, sólo otra espada podrá abrirse paso burlando la tiranía del destino: el hombre que así vive, cuando muere, perdiendo lo que tiene de finito queda por sus obras como una manifestación creciente de poder, de ciencia y de gloria hasta recibir su apoteosis de la poesía y del agradecimiento de los pueblos. El cielo en que habitan los héroes reposa sobre la tierra; por eso es la verdad de lo que ahora anuncio, Hidalgo, Allende, Matamoros, Morelos, nos contemplan!
Ayer y hoy, leer y comprender la trascendente obra del liberal guanajuatense Ignacio Ramírez “El Nigromante”, es un palimpsesto cotidiano. ¡Hasta el próximo palimpsesto!