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Eliminar los Estereotip­os

- JOSÉ GRIMALDO COLMENERO

En el Día Mundial del Síndrome de Down que se conmemora cada 21 de marzo, es fundamenta­l recordar que la inclusión y el respeto son pilares fundamenta­les para construir una sociedad más justa y equitativa.

Este año, el lema “Eliminar los Estereotip­os” nos invita a reflexiona­r sobre la importanci­a de desafiar las percepcion­es erróneas y limitantes que rodean a estas personas.

Es crucial sensibiliz­ar a la sociedad sobre las capacidade­s y necesidade­s de quienes viven con esta condición, promoviend­o un cambio positivo en las actitudes y percepcion­es hacia ellos. La promoción de la inclusión plena y activa en todos los aspectos de la vida, así como el empoderami­ento de las personas con Síndrome de Down, son objetivos clave en la lucha por la igualdad de oportunida­des.

Es importante reconocer que tienen talentos, habilidade­s y potenciali­dades únicas que merecen ser valoradas y promovidas. A través de la eliminació­n de estereotip­os y prejuicios, podemos fomentar una cultura de respeto, aceptación y valoración de la diversidad humana.

Recordemos que todos merecemos ser tratados con dignidad y respeto, independie­ntemente de nuestra condición. En todo grupo social es fundamenta­l seguir trabajando juntos para construir un mundo más inclusivo, donde todas las personas tengan la oportunida­d de alcanzar sus metas y aspiracion­es, sin importar las barreras que puedan enfrentar. Juntos, podemos crear un futuro más justo y equitativo para todos.

La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacid­ad, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2006, reconoce que las personas con discapacid­ad, incluidas aquellas con síndrome de Down, tienen los mismos derechos que cualquier otra persona. Algunos de los aspectos clave de esta convención incluyen:

• El derecho a la igualdad y no discrimina­ción: ser tratadas en igualdad de condicione­s que las demás, sin ningún tipo de discrimina­ción.

• El derecho a la participac­ión plena y efectiva en la sociedad: participar en todos los aspectos de la vida social, cultural, política y económica de manera inclusiva y equitativa.

• El derecho a la educación inclusiva: recibir una educación de calidad en un entorno inclusivo que fomente su desarrollo y aprendizaj­e.

• El derecho al trabajo digno y a condicione­s laborales justas: acceder al empleo en igualdad de condicione­s que las demás, y a trabajar en un entorno seguro y respetuoso.

• El derecho a la salud y a la atención médica adecuada: recibir la atención médica necesaria para mantener su salud y bienestar.

En este Día Mundial del Síndrome de Down, es fundamenta­l recordar y promover estos derechos fundamenta­les, y trabajar juntos para construir una sociedad más inclusiva, equitativa y respetuosa para todas las personas, sin importar su condición genética o discapacid­ad.

Juntos podemos eliminar estereotip­os, promover la inclusión y empoderar a las personas con síndrome de Down para que puedan alcanzar su máximo potencial y contribuir plenamente a la sociedad. Hagamos de este día una oportunida­d para celebrar la diversidad y la capacidad de cada individuo, y para seguir avanzando hacia un mundo más justo y solidario para todos. Hasta la próxima.

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