Herramienta
Si después de poner la base terminas con una capa gruesa notoria o, bien, con una cobertura que se esfuma a las pocas horas, es momento de elegir el instrumento correcto para aplicarla.
BEAUTY HACK
Aunque los maquilladores aseguran que para aplicar bien la base es vital usar brochas, lo ideal es que sin importar si usas éstas, una esponja o los dedos, des un masaje sobre tu piel al distribuir la fórmula para que se caliente, actives la circulación y logres cubrir los poros y las imperfecciones. Para las bases líquidas o en crema, las brochas de cerdas sintéticas son una excelente opción. Las esponjas son ideales para las texturas en polvo o líquidas.