Impunidad en caso de periodista
El crimen sigue sin resolverse, aún no dan con las respuesta a la muerte de la corresponsal de La Jornada
CHIHUAHUA, Chih.Hoy se cumplen 365 días del artero asesinato de la periodista Miroslava Breach Velducea, corresponsal de La Jornada. Solo hay un imputado, un autor material silenciado, una supuesta orden de aprehensión girada a un tercer involucrado, ningún político priista o panista señalado, un gobernador molesto cada vez que se le cuestiona, periodistas insatisfechos por el actuar de la Fiscalía y una periodista exiliada. Sin dejar de mencionar la lucha que la familia libró en los tribunales para ser reconocida como una víctima indirecta y tener acceso al expediente. En resumen, la impunidad campea.
Ramón Andrés Zavala Corral descargó su arma contra la humanidad de la periodista Miroslava Breach Velducea. Los primeros tres disparos impactaron en el parabrisas de la Duster color guinda en la que viajaba la periodista acompañada de su hijo, tres más los disparó de frente, luego otros dos en la ventanilla izquierda. De esos ocho balazos, siete dieron blanco en la cabeza, mano, corazón y tórax. Le arrancaron la vida de manera artera.
La inmolación de Miroslava se había cumplido. Una periodista valiente había sido silenciada por realizar su trabajo.
El asesinato de Miroslava Breach se derivó de su trabajo periodístico, el reportaje de los llamados “narcocandidatos” del Partido Revolucionario Institucional y del Acción Nacional vinculados con bandas criminales fue un gran pisotón a los intereses financieros, políticos y de seguridad, ya que las policías municipales están infiltradas.
Durante su ejercicio periodístico logró documentar el dolor, la tristeza, la muerte y la decepción que ha dejado el crimen organizado en el estado. Documentó cómo los líderes delincuenciales, entre ellos Carlos Arturo Quintana y los Salazar Zamorano, coludidos con los políticos corruptos trataron de imponer a sus candidatos para las elecciones del 2016. Esta situación se replicaba en 34 de los 67 municipios. Su trabajo periodístico motivó el cambio de los dos presuntos candidatos
DURANTE su ejercicio periodístico logró documentar el dolor, la tristeza, la muerte y la decepción que ha dejado el crimen organizado en el Chihuahua
vinculados al narcotráfico, Silvia Mariscal Estrada de Bachíniva y Juan Miguel Salazar Ochoa en Chínipas.
De la misma manera denunció que Schultz Alcaraz designó como director de Seguridad Pública Municipal a Martín Ramírez, otro de los sobrinos del capo Crispín Salazar. A Martín se le vincula con varios asesinatos y desapariciones de personas.
De acuerdo a los videos recuperados cerca de la escena del crimen, un hombre con sudadera verde y gorra azul va caminando, lleva una cartulina con el mensaje firmado supuestamente por el líder del grupo delictivo La Línea en la región noroeste, Carlos Arturo Quintana el 80, el contenido amenaza al gobernador y se atribuye el homicidio.
Derivado de las investigaciones, testimoniales, videos, mensajes y llamadas, se logró determinar que Ramón Andrés Zavala Corral, asesino a sueldo; Juan Carlos Moreno Ochoa alias el detenido y bajo proceso; y Wilbert Jaciel Vega Villa, tercer coautor del homicidio y actualmente prófugo, estuvieron juntos durante seis días –del 22 al 26 de marzo de 2017- en la vivienda propiedad de Cruz del Rosario Pérez Vega, esposa del Larry. Se dice que el Larry es el autor intelectual del homicidio, pero es solo un asesino al servicio del Cártel de Sinaloa y se presume que el homicidio de la periodista lo perpetraron como un regalo de cumpleaños para Adán Salazar Zamorano, don Adán, recluido en un penal de alta seguridad desde el 2011, pero quien sigue controlando la banda criminal.
Quien descargó el arma contra la periodista fue silenciado, Ramón Andrés Zavala Corral fue localizado sin vida en Álamos, Sonora, el 19 de diciembre del 2017. Una semana después fue detenido Juan Carlos Moreno Ochoa, el Larry, por la Policía Federal en el poblado de Etchojoa, Sonora. El tercer implicado es Wilbert Jaciel Vega Villa y actualmente está prófugo de la justicia; fungió como conductor del auto Malibú color gris, en el que se trasladó el asesino de la periodista.
En cuanto a los políticos implicados, no hay sanciones. Se desvanecieron en la investigación. A pesar de todo ello y que Javier Corral señaló que la principal línea de investigación del asesinato es su trabajo periodístico, enfocado a temas relacionados con la “narcopolítica”, todo se ha ido diluyendo.
MIROSLAVA BREACH
VÍCTIMA
Miroslava Breach es de Chínipas y no va a revelar fuentes de información, que me la echen a mí, yo sí tengo ovarios"