Murieron 693 mil por padecer la diabetes
Pese a estadísticas, hay desinterés de gente de cuidar alimentación, asegura médico
VERACRUZ, Ver., 9 de noviembre.Tan sólo en 2017 murieron 693 mil personas en Veracruz a consecuencia de la diabetes mellitus y de continuar con la mala alimentación, la cifra aumentará de manera alarmante, aseguró Víctor González Cruz, médico e integrante de la agrupación “VeracruSano, por una vida libre de enfermedades”.
En el marco de la celebración del Día Mundial de la Diabetes a realizarse este 14 de noviembre, el médico de profesión indicó que según estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) hay 422 millones de diabéticos en el mundo y 318 son prediabéticos, que en un lapso corto de tiempo estarán en la misma situación.
En México se han levantado estadísticas que va de 17 a 18 millones de personas con problemas de diabetes, mientras que en Veracruz hay cerca de 2 millones de diabéticos, colocándose como el primero a nivel país y el sexto a nivel mundial.
Se estima que de esta población, 3% son niños, que a consecuencia de la comida chatarra tienen este padecimiento y su calidad de vida empeora con los años.
“El hombre de hoy en día ha perdido toda sensibilidad humana, digo esto porque si la gente tuviera conciencia de este problema no compraría la comida chatarra que le están ofreciendo en las calles, porque ése es uno de los factores predisponentes de la diabetes mellitus, la comida callejera y la misma comida de la casa, cuando es sumamente grasosa”, detalló.
Señaló que la mala alimentación además de provocar diabetes, genera problemas cardiacos, oculares, problemas renales, psicológicos y de otro tipo, y pese a ello la gente no hace conciencia y pareciera que no le interesa su salud.
“La gente debe empezar a quererse, cuidar su cuerpo, tener una alimentación adecuada, tal parece que la gente no se quiere”, añadió. Mencionó que este 14 de noviembre se llevará a cabo una jornada médica donde se realizaran 250 pruebas gratuitas a la población en general para revisar sus niveles de glucosa y que a tiempo puedan empezar un tratamiento que reduzca el riesgo de problemas renales, oculares o incluso amputaciones.