Urge avanzar más rápido
Llama a cambiar estrategia contra grave enfermedad
Aunque poco a poco las muertes por tuberculosis van bajando, el número no ha reducido al ritmo que se necesita. El informe mundial sobre tuberculosis de 2017, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de presentar, muestra que casi 1.7 millones de personas perdieron la vida en 2016 por culpa de esta dolencia.
“El País” informa que el número de nuevas infecciones se mantiene en 10.4 millones. La tasa de mortalidad está cayendo al 3% anual; la incidencia, al 2%. Estas cifras tienen que aumentar a un 4-5% y un 10% respectivamente para cumplir con el calendario que marca la estrategia de eliminación, que tiene como objetivo final reducir un 90% las muertes y un 80% la incidencia en 2030 con respecto a 2015.
José Luis Castro, director general de la Unión Internacional contra la Tuberculosis y las Enfermedades Respiratorias, hizo un llamado para modificar la estrategia contra la enfermedad: “La epidemia es más que un problema médico. También lo es social, político y económico y necesitamos diferentes tipos de profesionales trabajando de forma efectiva si vamos a eliminar la tuberculosis”.
“Estamos hablando de una enfermedad que se contagia por el aire, que se está convirtiendo en cada vez más resistente a los antibióticos que tenemos contra ella”.
Este es precisamente uno de los grandes problemas que vienen señalando los sucesivos informes de la OMS. En el de 2017, expone que se estiman 600,000 nuevos casos resistentes a la rifampicina, el medicamento de primera línea más efectivo. De ellos, 490,000 presentan resistencia a varios fármacos, fenómeno al que se que se conoce como multirresistencia.
Los expertos calculan que en 2050 las resistencias a los antibióticos será la primera causa de muerte en el mundo por delante del cáncer.
La OMS hizo un llamamiento a la comunidad internacional para poner todas las herramientas necesarias sobre la mesa para terminar con la epidemia. Por primera vez, el problema se discutirá al máximo nivel en la próxima Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre del año que viene. “Estamos en un momento que nunca habíamos vivido antes para solucionar el problema”, aseguró en la presentación del informe Mario Raviglione, director de tuberculosis de la OMS.