Halla a su bebé muerto a golpes
Joven de Umán es retenido por ultimar a su hijo
UMÁN.— Tras su primer día de trabajo en una tienda de ropa en el centro de esta ciudad, María Poot Cauich, de 22 años, llegó a su casa y halló a su hijo Jesús Alejandro Pacheco Poot, de 18 meses de edad, asesinado a golpes, envuelto con un cobertor en una hamaca.
Ayer trascendió que la Fiscalía del Estado tiene retenido a José Javier Pacheco Várguez, de 22 años, padre del infante y esposo de la joven, como sospechoso del brutal homicidio.
Según vecinos y autoridades, el joven no tiene empleo, es adicto al alcohol y al pegamento y tiene cinco ingresos al penal y quejas por violencia familiar.
UMÁN.— Indignación generó en esta ciudad la muerte de Jesús Alejandro Pacheco
Poot, de un año y medio de edad, por una golpiza que presuntamente le propinó su propio padre, José Javier Pacheco Várguez, de 22 años.
De acuerdo con los reportes policíacos, el menor murió el miércoles 22 en la vivienda 123 de la calle 10 entre 27 y 29 de la colonia Santa Cruz, que se encuentra asegurada por la Fiscalía del Estado para integrar la carpeta de investigación A3A3/000421/2017.
Según los informes, María Poot Cauich, de 22 años de edad, el miércoles fue a su primer día de trabajo en una conocida tienda de ropa en el centro de esta ciudad, con horario de 2 de la tarde a 10 de la noche.
La joven decidió trabajar porque su esposo, Pacheco Várguez, está desempleado.
Según una versión, la pareja acordó que ella trabaje y él cuide a los dos hijos, el extinto Jesús Alejandro y José, de 3 años de edad.
Envuelto en un cobertor
Cuando María Poot llegó de noche a la casa fue a ver a su hijo que se encontraba en una hamaca. Lo halló envuelto en un cobertor y, al destaparlo, se percató de que tenía destrozada la cara y que no se movía.
Asustada le pidió ayuda a una vecina para que la acompañe a la clínica del Seguro Social, en la calle 29 del centro de esta ciudad.
María Poot, con su hijo envuelto en una manta, llegó poco después de las 10 de la noche a la clínica. Mientras lloraba desconsolada, la mujer pedía que por favor atiendan a su hijo.
Uno de los presentes, tras ver a la mujer llorando y con su hijo en brazos, avisó a la Policía Municipal.
Agentes municipales revisaron al niño y vieron que no tenía signos vitales y presentaba rigidez cadavérica, un hematoma en la frente y una lesión en la boca, entre otras heridas.
Ante ello, los policías avisaron a la Fiscalía.
La Policía Municipal informó que personal de la Fiscalía aseguró la vivienda y detuvo en el IMSS, el mismo miércoles en la noche, a Pacheco Poot, quien estaba ebrio, para interrogarlo.
La Fiscalía, sin embargo, informó ayer viernes que integra la carpeta de investigación “sin detenidos” y que solicitará a un juez la orden de aprehensión contra Pacheco Poot.
No obstante, trascendió que la Fiscalía tiene retenido al joven como sospechoso.
El Servicio Médico Forense (Semefo) se llevó el cuerpo para hacerle la autopsia.
La necropsia determinó que la causa de la muerte del
niño fue un “choque hipovolémico (hemorragia) secundario a un trauma abdominal cerrado”.
También determinó que el niño tenía el rostro casi destrozado, golpes en la zona occipital (hueso posterior de la cabeza) y en el pecho, y hemorragias internas.
La Fiscalía requirió que la madre comparezca para declarar sobre los hechos, a fin de integrar la carpeta de investigación.
La noticia del deceso del menor causo indignación en entre quienes sabían del nivel de violencia con el que vivía la familia, ya que Pacheco Várguez es conocido por sus vecinos como un joven que “no tiene un empleo fijo, es alcohólico, inhala pegamento y es muy violento” con su propia familia.
Además, ayer se informó que Pacheco Várguez tiene cinco ingresos al penal, acusado de diversos delitos.
Vecinos relataron que el miércoles en la tarde vieron a Pacheco Várguez salir a comprar cervezas mientras su esposa trabajaba.
Indicaron que unos días antes María Poot y sus hijos abandonaron a Pacheco Várguez porque éste golpeó a la joven, pero a la semana de la golpiza ella regresó con él.
Uno de los vecinos expresó: “Muchos nos preguntamos la razón por la que volvió con él sabiendo que constantemente eran agredidos”.
No sale de una casa
Según se averiguó ayer, la joven está en “shock” por la muerte de su hijo menor y vive, junto con su hijo mayor, en casa de unos familiares, presuntamente sus padres, pero no sale del predio.
Ayer viernes se esperaba que el Semefo entregue el cuerpo del niño a los familiares para la sepultura.
Trascendió que los familiares de Pacheco Poot afirman que el niño murió debido a que se cayó.—