Ataque en Cancún
Balaceras en la Fiscalía, calles y un centro comercial: cuatro muertos
Envío de fuerzas federales para Quintana Roo
El ataque armado contra oficinas de la Fiscalía en Cancún es consecuencia del combate a la impunidad y corrupción de grupos criminales acostumbrados a que sus fechorías no sólo no tenían castigo sino que eran toleradas, aseveró anoche el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González.
El mandatario dijo que tras hablar con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, acordaron el envío de fuerzas federales para reforzar el orden y la seguridad de los ciudadanos.
Joaquín González confirmó la muerte de cuatro personas: el policía ministerial Humberto Mora Ochoa y tres delincuentes. Hay cinco detenidos.
“Nadie estará por encima de la ley, el que la hace la paga. No vamos a bajar la guardia”, subrayó.
A las 4 p.m. de Quintana Roo (3 p.m. en Yucatán), 10 personas fuertemente armadas ingresaron a la Fiscalía, en la avenida Xcaret, mataron al agente Mora Ochoa y se enfrentaron a personal de guardia.
Al salir del lugar fue abatido uno de los agresores, y a unos kilómetros de ahí, en otro enfrentamiento murió uno más.
La tensión y el miedo se apoderaron de los habitantes de Cancún. Los intensos patrullajes y persecuciones intranquilizaron a muchos habitantes y convirtieron algunos puntos de la ciudad en un caos, pese a que las autoridades instaban a la calma.
El miedo era mayor porque los tiroteos ocurrieron sólo un día después del ataque a la discoteca “Blue Parrot” de Playa del Carmen, donde murieron cinco personas y otras 15 resultaron heridas.
Después del ataque en las oficinas de la Fiscalía de Cancún, en Plaza de las Américas, un centro comercial cercano, se oyeron tiros y cientos de personas corrieron despavoridas para salir, aunque no estaba claro qué pasaba.
Irma Huxool, una mujer que acaba de comprar entradas para ir al cine, dijo a la prensa que escuchó tres disparos. “Estaban dando balazos en la entrada del cine, entre Liverpool y Zara”.
En otro punto de la ciudad, artefactos explosivos fueron lanzados a una óptica. César Salgado, el dueño del establecimiento, lamentaba lo que estaba ocurriendo con la cara ensangrentada.
“No sé qué está pasando, uno viene a un lugar tranquilo a vivir, con una mejor calidad de vida y te llevas esta sorpresa”, indicó. “Las autoridades deben detener esto”.
Ayer por la mañana, una foto subida a las redes sociales sugería que el ataque en la discoteca de Playa del Carmen era fruto de una lucha entre grupos del crimen organizado, ya que en una manta firmada por “Zetas vieja escuela”, una escisión del cártel de los Zetas, se amenazaba al personal del festival musical realizado en “Blue Parrot” y se decía que iban a “cortar cabezas” por no alinearse a los criminales.
El fiscal de Quintana Roo, Miguel Ángel Pech Cen, informó que las autoridades investigan dos narcomantas.