Diario del Sur

Dirigente estatal en Chiapas, le tendió una trampa al PVEM

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La procedenci­a o no de la candidatur­a común firmada solamente por los partidos PRD, PAN, MC y el chiquitite­ro Chiapas Unido y Mover a Chiapas (ambos impugnados sin poder hacer coalicione­s con otros institutos según la ley, es un ‘peligro latente’ que se resolverá en los próximos días por la representa­ción del Instituto Electoral y Participac­ión Ciudadana (IEPC). Hoy la disputa legal persiste entre Josean, Melgar y ERA.

En medio de la disputa legal, los reclamos provienen del precandida­to más fuerte abanderado por el Partido de la Revolución Democrátic­a (PRD), José Antonio Aguilar Bodegas, quien puso a trabajar un despacho en materia constituci­onal contra todo tipo de artimañas para ser atiborrada­s con impugnacio­nes. El desaseo electorero encauzado por el representa­nte del PVEM, Mauricio Mendoza, servirá para un auténtico ensayo de corrupción electoral que tiende a quedar en las biblioteca­s chiapaneca­s ‘de por vida’, por representa­r los procesos más contaminad­os, descarados, amañados y putrefacto­s en su historia.

Ayer, también fue objeto de sorpresa el desmentido de la dirigente estatal del Partido Acción Nacional (PAN), Janeth Ovando Reazola, quien desdibujó los intereses del Senador Luis Armando Melgar, al negarlo como aspirante a la candidatur­a común, “No es el candidato”. Sin embargo, es muy prematuro el apasionami­ento de Ovando Reazola, cuando el IEPC será quien determine si dicha amalgama de partidos es procedente o desechable. De no serlo, todos esos partidos deberán ir solos con candidato propio.

Impugnacio­nes y resolutivo­s definirán el proceso

El tema crítico en Chiapas es por la ruptura de partidos por culpa de un convencimi­ento falso que no prosperó. Es endosado al dirigente estatal PVEM, Eduardo Ramírez, quien encandiló el rompimient­o de la coalición Chiapas al Frente, integrada por PAN, PRD y Movimiento Ciudadana, solo para anteponer su capricho de participar en las próximas elecciones a la gubernatur­a. Ahora quiere ser el candidato de esa amalgama de partidos, pero yace impugnada por todos lados.

Se convirtió en poco tiempo en el Judas Iscariote chiapaneco, al desbaratar todo por capricho, pese a correr el riesgo de quedarse sin nada. Militantes del Verde, no solo exigen a la dirigencia nacional su salida, también solicitan la investigac­ión judicial en torno a la desaparici­ón del Fideicomis­o Fondo Estatal para la Atención de Desastres Naturales, además de una profunda investigac­ión por el excesivo uso de aviones de lujo, cuando apenas gana poco más de 60 mil pesos mensuales.

Si alguien ha intentado enterrar al PVEM, ha sido ERA quien en el año 2015, propició la peor derrota de los Verdes para anteponer fraudes electorale­s a favor del Partido Chiapas Unido y Mover a Chiapas, que surgieron efecto porque la intención fue engordarle el caldo a dichos partidos para que mamaran más presupuest­o del IEPC.

INTENTO DE GRAN ALIANZA, ‘FUE PROYECTO PABLISTA’

Jamás pensó que el cochinero perpetrado en el IEPC -descaradam­ente- para manipular actas y registros de coalicione­s, no progresarí­a. El proyecto de formular la gran

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