Contratan sexoservicios y terminan extorsionados
Las llamadas escort graban a sus clientes y luego le exigen fuertes sumas por no hacer públicos los videos
Las extorsiones en Tapachula han llegado hasta el sexoservicio a través de las llamadas escort, quienes por medio de redes sociales contactan a sus clientes, los citan, los graban y después del encuentro les exigen grandes cantidades de dinero por no ser exhibidos.
La pesadilla la vivió Pedro N de 40 años de edad. Relata que tras ingresar a una página de internet decidió solicitar los servicios de una escort. Primero le indicó que el servicio era completo con un costo de mil 500 pesos la hora, y media hora por mil 200 pesos, a lo cual decidió aceptar.
La escort, le pidió que acudiera a un motel, y que al estar en la habitación le mandara su ubicación, por lo que el cliente muy emocionado ingresó en su auto un poco apenado por lo céntrico del lugar, pero dispuesto a pasar un rato agradable.
Al llegar fue recibido por una joven que no se parecía a la que había visto por Internet. Se identificó como Patricia de aproximadamente 25 años, muy bien vestida quien le explicó cómo era la situación: sin besos en la boca, ni tocarla con fuerza, pidiéndole que se relajara.
Al terminar la relación sexual, ella rápidamente se fue en un taxi local, mientras que Pedro enfilo hacia su domicilio.
COMIENZA EL MARTIRIO
Los interesados en adquirir caricias deben ser cautelosos y verificar que no sean extorsionadores de clientes
PEDRO “N” Con lo que me pasó es la primera y última vez, no quise exponer la seguridad de mi familia y eso de andar investigando los datos personales ya es un delito más grave”
Desde otro número un sujeto le mandaron un mensaje vía WhatsApp exigiendo dinero a cambio de guardar silencio por lo sucedido en el motel.
Al principio lo tomó como broma de algún conocido, pero después le pidió que le depositará 5 mil pesos en una cuenta Oxxo y le mandó capturas de un video en donde se apreciaba el motel al que había asistido y a él completamente desnudo.
El extorsionador en repetidas ocasiones le mencionó que le daría media hora o lo subiría a varios grupos de Facebook.
La víctima, por miedo a represalias y a que le hicieran daño a su familia, decidió acceder realizando un primer depósito. A la hora, del mismo número nuevamente a le pidieron 3 mil pesos más o definitivamente las cosas iban a subir de tono, indicándole que tenían ubicados su casa, trabajo, carro e información personal, por lo que volvió a ceder, pero ya desesperado decidió cambiar todo para evitar la extorsión que lo acababa psicológicamente.
Finalmente Pedro pidió ayuda a un investigador privado y descubrió que no era el único estafado, pues hay muchos que por miedo a perder a su pareja están en el anonimato.
Algunas de las sexoservidoras son profesionistas o universitarias que en algunos casos son mandadas por “jefes” que se dedican al tráfico de blancas y que las obligan a no salirse del negocio ante el temor de ser exhibidas ante la sociedad.
De acuerdo con autoridades estatales, hay muchas páginas con perfiles falsos que buscan timar al cliente, “son inteligentes al esconder sus celulares en lugares estratégicos para poder grabar el momento de la relación sexual y después empezar con la guerra psicológica de exhibirlo a través de redes sociales”.
La mayoría de extorsionados, por temor a que sea descubierta su identidad o lugar de trabajo, deciden callar, mientras este tipo de situaciones continúan y la Fiscalía General de la República tiene pocas denuncias por lo que todo siguen.
Dueños de moteles en Tapachula señalan, no saber ni tener contacto con las sexoservidoras, ya que son independientes. Algunos cuentan con cámaras de seguridad, pero muchas no funcionan.