Regreso a clases, cada vez más cerca
Pocas cosas son tan emblemáticas del ansiado retorno a la normalidad como lo es el momento en que por fin los niños y jóvenes en el país puedan regresar a clases presenciales.
Por esto, la conferencia matutina de ayer, a un año en que se decidió que las clases se harían a distancia para proteger a la población del contagio por el virus SARS-COV-2, resulta esperanzadora, pues ya la Secretaría de Educación Pública Federal y la Secretaría de Salud se encuentran proyectando el paulatino regreso a clases para los estudiantes de educación básica.
De hecho, nuestro presidente, Andrés Manuel López Obrador, mencionó en la conferencia matutina de ayer que hay entidades que podrían estar ya retomando las clases presenciales terminando la Semana Santa.
En esta posibilidad se encuentra Campeche, que ha mantenido su semáforo epidemiológico en verde durante varias semanas y que ya logró vacunar a sus maestros, lo que le permitiría retomar clases en las aulas en los próximos días. El Ejecutivo federal también mencionó como posibilidad a Sonora y a Chiapas.
Lo cierto es que el hecho de que ya se estén discutiendo los protocolos que se podrían implementar para las escuelas de educación básica en el país, tales como la reducción del número de alumnos por grupo, el uso de cubrebocas obligatorio, la ventilación de las aulas y los filtros sanitarios, entre otras medidas posibles de implementar, nos dan la esperanza de que avanzamos ya al fin de la pandemia pues, aunado a que la vacunación está en marcha y se verá incrementada en el futuro cercano, de acuerdo a lo que ha venido informando el canciller Marcelo Ebrard, el regreso a clases significa un gran paso hacia la meta de superar la pandemia. En Sinaloa, estamos avanzando con la vacunación para el personal de salud y adultos mayores, y confiamos que en los próximos días se acelere el ritmo para también estar dentro de las entidades en posibilidades de retomar clases presenciales de manera segura lo antes posible, lo que, además de significar un gran paso para la salud emocional y de convivencia de nuestros niños y jóvenes en edad escolar, también será, sin duda, un impulso para la economía en nuestro estado.