Los Hawks se encuentran enrachados
Atlanta suma 8 victorias en fila para liderar la División Sudeste de la Conferencia del Este
Los Halcones de Atlanta son el equipo más enrachado de la NBA. Bajo el mando del entrenador interino Nate Mcmillan, suman 8 victorias de manera consecutiva, la más reciente el sábado sobre los campeones Lakers de Los Ángeles, en el juego en el que Lebron James salió por lesión.
Los ocho triunfos de Mcmillan son la mayor cantidad para un entrenador interino después de asumir el cargo de un equipo desde que Lawrence Frank comenzó 13-0 con los New Jersey Nets en 2003-04. Con su marca de 22 triunfos y 20 derrotas, los Halcones se ubican en el liderato de la División Sureste y en el cuarto sitio de toda la Conferencia del Este.
Los Bucks de Milwaukee son otro equipo que pasa por un buen momento. Comandados por Giannis Antetokounmpo, los Bucks han redescubierto la fórmula que los ha llevado a coronas consecutivas de temporada regular. Milwaukee ahora se encuentra a solo dos juegos de los 76ers de Filadelfia por el liderato del Este luego de seis triunfos consecutivos, con 11 victorias en sus últimos 12 compromisos.
Los Sixers ha mantenido el primer lugar en la Conferencia Este sin Joel Embiid durante la semana pasada, obteniendo tres victorias y manteniéndose un juego por delante de los Nets, pero les espera una semana demandante, ya que se dirigen hacia el oeste, donde tendrán dos juegos en Los Ángeles contra los Lakers y los Clippers.
u El salvaje Oeste La conferencia del Oeste y toda la liga sigue siendo encabezada por el Jazz de Utah, aunque los de Salt Lake City han bajado la intensidad en las últimas jornadas. Luego de un inicio de 24-5, los Jazz tienen marca de 6-6, lo que le ha permitido a los equipos de la División Pacífico acercarse en la lucha por el primer lugar de la Conferencia. Los Phoenix Suns son su principal escolta, ya que se mantienen por encima de los campeones Lakers y los poderosos Clippers.
Los de Arizona ligan dos victorias, la más reciente el domingo ante los Lakers, partido en el que Chris Paul se unió a un club exclusivo. Con su novena asistencia en el juego, se convirtió en el sexto jugador en la historia de la NBA en alcanzar las 10,000 asistencias en su carrera, uniéndose a John Stockton (15,806), Jason ≋idd (12,091), Steve Nash (10,335), Mark Jackson (10,334) y Magic Johnson (10.141).