¿Austericidio en Sinaloa?
«El candidato Rocha Moya nos propone reproducir en Sinaloa el austericidio que hoy tiene atrofiado y bastante destartalado al Gobierno federal»
En el marco de la campaña electoral por la gubernatura de Sinaloa, las propuestas de los principales candidatos empiezan a ser contrastantes. Mientras un candidato plantea la creación de fondos para financiar actividades productivas y dinamizar la economía regional, el otro candidato hace la oferta de imponer una austeridad extrema durante su ejercicio de Gobierno.
Mario Zamora recientemente presentó su primer paquete de propuestas. Estas tienen que ver con su experiencia profesional en el servicio público. Propuso la creación de una Financiera Estatal, que operaría con un fondo de mil millones de dólares, mismos que serían gestionados ante el Banco Mundial y ante el Banco Interamericano de Desarrollo.
De lo que se trata, afirmó Mario Zamora, es aprovechar el bajo costo del financiamiento que ahora existe a nivel internacional para canalizar recursos baratos en apoyo de los sectores productivos de Sinaloa. Esta medida se complementaría con la creación del Centro de Emprendedor, una Red Comercial y un Fondo de Infraestructura para financiar proyectos de obra pública.
Además, el candidato de la coalición PRI, PAN, PRD, propone que el Gobierno estatal sea muy activo en la promoción de nuevas inversiones privadas, nacionales y extranjeras, con el objetivo de generar miles y miles de empleos que demandan los sinaloenses. Vista en conjunto, la propuesta de Zamora pretende utilizar el financiamiento como vía para recuperar la economía regional. Por su parte, en una versión que es totalmente opuesta, el candidato Rubén Rocha propone aplicar una fuerte política de austeridad gubernamental. Desde su muy particular forma de ver las cosas, el candidato de Morena y del PAS considera que la austeridad es la mejor solución para impulsar el desarrollo de Sinaloa. Pero lo que ocurre a nivel nacional desmiente las bondades que pueda traer la austeridad en el sector público. Diversos analistas, entre ellos Héctor Aguilar Camín, no han dudado en calificar como austericidio lo que ocurre actualmente en el Gobierno federal. Debido a la austeridad extrema, el Gobierno se ha paralizado y las oficinas públicas se encuentran deterioradas.
El austericidio, entendido como la política de reducción de presupuesto público a las oficinas y dependencias gubernamentales, ha causado verdaderos estragos. Inhibe toda actividad del sector público, reduce salarios, elimina programas sociales y productivos, y las instituciones pierden toda su capacidad de acción y promoción del desarrollo.
Pero cuando se está en medio de la campaña electoral, y se carece de un proyecto de Gobierno, propio y de carácter regional, entonces hay que copiar políticas que se aplican en otro contexto, aún sin analizar las consecuencias negativas que pudieran traer. El candidato Rocha Moya nos propone reproducir en Sinaloa el austericidio que hoy tiene atrofiado y bastante destartalado al Gobierno federal.