Pese al peligro expertos ven estrategia detrás de filtraciones de datos personales
Para el politólogo José Antonio Carrera, la exposición de los números telefónicos de algunos políticos de Morena son una forma de blindarse;jorge Márquez dice que es venganza de AMLO
“Lo mejor es lo peor que se va a poner”, dijo ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador en su conferencia matutina tras una semana de polarización política en la que el broche de oro ha sido la filtración de los números telefónicos personales de las candidatas presidenciales Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez. Los analistas observan que se trata de una estrategia peligrosa y de un escenario poco convencional rumbo al inicio de las campañas federales.
Filtración
López Obrador fue el primero en revelar el número de teléfono de una reportera y tras las críticas la lluvia de filtraciones no se han detenido entre políticos de Morena y la Coalición Fuerza y Corazón por México.
El politólogo y académico de la UAM José Antonio Carrera Barroso opinó en entrevista para EL DEBATE que era cuestión de tiempo para que algo así pasara en la arena política, al considerar que la falta de protección a los datos personales afecta desde hace tiempo a los ciudadanos en general. Sin embargo, en los casos recientes de políticos, consideró que la filtración salió de adentro. “Los políticos que son los primeris en denunciar, de alguna forma lo hacen para blindarse. Pero yo lo veo muy delicado en términos democráticos, porque al final del día la Constitución garantiza el derecho a la privacidad”, lanzó.
Reacciones
Claudia Sheinbaum denunció con una imagen en la que se lee un mensaje de ataque y compartió el siguiente mensaje: “El día de hoy he estado recibiendo llamadas sin parar y mensajes de odio (como el que muestro), pues alguien publicó mi número de teléfono celular en redes sociales. Es obvio lo que quieren hacer, de nuevo sus ataques son tan burdos como inofensivos. Los números que deberían preocuparles son los de las encuestas. A cambiar el número de teléfono”, expuso. En tanto, la aspirante de PAN, PRI y PRD, Xóchitl Gálvez lo tomó con humor y señaló que no cambiará de teléfono. Dijo que ha recibido 36 mil mensajes, de los cuales el 95 por ciento son positivos, mientras que el resto son mensajes de odio y amenazas. Incluso, en su Conferencia de la Verdad llamó a las personas que le han dejado mensajes. “Te mando un beso”, le respondió a quien le llamó con palabras de odio.
Jugada
El politólogo y catedrático de la UNAM Jorge Márquez añadió en entrevista para EL DEBATE que el presidente ha tomado la situación como una venganza personal, y las candidatas lo toman como parte de su campaña. “Sheinbaum de inmediato se victimiza y dice que está muy mal… es pobrecita Sheinbaum. Y Xochitl dice, `pues no, yo hago campaña de otra manera. A mí me están hablando para felicitarme'. Entonces son respuestas también no convencionales. Quien sea menos convencional va ganando el debate aquí”, opinó.
Para el especialista, si bien las filtraciones iniciales que surgieron en torno a funcionarios de la 4T se dieron por parte de Guacamaya Leaks, no descartó acciones desde dentro de los partidos. Jorge Márquez dijo que son tiempos de un juego político donde las reglas están todavía por escribirse y que va a tener repercusiones muy claras en la elección.
Privacidad
Por su parte, Roberto Soltero consideró que este panorama se vuelve difícil para el entorno político que se va a vivir rumbo a las campañas presidenciales, por lo que todos deberían observar, y principalmente las autoridades gubernamentales, el irrestricto respeto a la ley de datos personales.
Durante este periodo, consideró, se vivirán más situaciones de este tipo relacionadas a la llamada “guerra sucia”, y de ambos lados.
“Se cuenta con acceso a tecnología de punta. El gobierno la tiene a través de Pegasus y también grupos de la sociedad civil cuentan con esa tecnología, de tal manera que según la conveniencia política podrán hacerlo o no público, según se considere pertinente”, opinó.
Campañas
José Antonio Carrera Barroso, politólogo y académico de la UAM, dijo que se trata de una contraofensiva entre Morena y las personas que se resisten a la 4T, porque atenta contra sus privilegios. Sin duda, consideró que el proceso electoral navega en un marco de comunicación política en donde tanto Morena como PAN, PRI y PRD quieren demostrar quién tiene la fuerza popular más grande.