Mujeres poderosas trazan el camino presidencial a Claudia y Xóchitl
Aunque no han logrado llegar a la silla presidencial, ellas han sido activistas, líderes de izquierda o derecha y de grupos de poder; algunas candidatas a la Presidencia permanecen en la escena política del país y luchan por sus ideales
Ocho mujeres en la historia de México han logrado derribar el patriarcado de los grupos políticos hasta alcanzar su candidatura a la presidencia del país. El camino no ha sido fácil, sobre todo frente a presiones que siguen arraigadas en la educación tradicional, como el machismo.
Para la elección de este 2 de junio, con Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, las expertas señalan que el reto será llegar y mantener una agenda de género.
El camino
La primera en alzar la mano por la Presidencia de la República fue Rosario Ibarra de Piedra. Al transitar el tormento de la desaparición de su hijo en 1975, se adentró en la política hasta buscar el máximo escaño dos veces, en 1982 y en 1988.
Un sexenio después, en 1994, dos mujeres más también alcanzaron la candidatura, solo que en partidos muy pequeños y sin lograr el 3 por ciento de los votos. Ellas fueron Cecilia Soto, con el entonces recién creado Partido del Trabajo, y Marcela Lombardo Otelo, que se postuló en el Partido Popular Socialista.
Durante el periodo de la caída del PRI hegemónico, otra mujer llegó a la candidatura presidencial. En 2006, Patricia Mercado compitió con el Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina. Para el 2012, la aspirante del PAN y PRD, Josefina Vázquez Mota, se convirtió en la quinta mujer candidata y representó un avance importante al ser la primera mujer candidata en lograr el mayor número de votos y con partidos relevantes. Posteriormente y con el reto mayúsculo de la candidatura independiente, un derecho alcanzado con el INE, apareció Margarita Zavala, aunque terminó por abandonar la contienda.
Figuras auténticas
La doctora en ciencia política Mónica Montaño Reyes destacó en entrevista para EL DEBATE que es reconocible que todas las mujeres que han llegado a la boleta es porque lo ganaron, lo lucharon desde el contexto en el que vivían y son auténticas, aunque diversos factores han impedido que lleguen a la silla presidencial. La especialista analizó que un perfil político parteaguas fue el de Patricia Mercado, con una verdadera lucha social, por todo el capital político que creó y a pesar de que fue postulada por un partido que no iba a ganar. “Ella puso el tema progresista mucho antes que otros candidatos. Desde que Patricia Mercado fue candidata en el 2006, puso en la agenda el tema de la comunidad lésbico-gay, de las mujeres, de los derechos, y entonces fue una de las grandes figuras en el movimiento ciudadano”, explicó.
Élites
Por lo anterior, consideró que sorprende que en la elección de 2024 no haya sido también nombrada candidata para competir junto con Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez. “Sabemos que los grupos más poderosos de los partidos, incluso los empresarios, las élites que hay en cada lugar, pues siempre buscan influir en quién será la candidata o candidato a partir de los acuerdos. En el caso de Josefina Vázquez Mota, otro ejemplo, sí se le dio la candidatura, pero pues era una elección que ya el PAN veía perdida. Obtuvo el mayor porcentaje de votos para una mujer candidata, con el 26 por ciento”, explicó. Montaño Reyes, también académica de la universidad de Guadalajara, reafirmó que la cercanía que ahora tienen Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, de llegar al máximo escaño, es justamente consecuencia de todas las luchas de paridad, de inclusión y sobre todo de que, al menos los partidos Morena, PRI, PAN y PRD, sí entendieron que ante el contexto actual era momento de asignar a una mujer candidata. “Porque esto al final de cuentas es aceptación de los partidos, las élites partidistas pudieran haber dicho que no, así como lo hizo Movimiento Ciudadano”, expuso.
Al respecto añadió que es de reconocerse que todas las que han llegado a la boleta, crecieron y expandieron un grupo político de respaldo y apoyo, algunas por ser esposas de o familiares de personas con poder. Sin embargo, mencionó que de otra forma no hubieran llegado en ese momento.
Tribunales
Por su parte, Azul Aguiar Aguiar, doctora de investigación en ciencia política y académica en el Iteso, analizó en entrevista para EL DEBATE que el proceso de posicionamiento político de las mujeres se aceleró en los últimos 15 años, en gran medida, gracias a los movimientos feministas. Además, destacó la labor de las mujeres en el Tribunal Electoral del INE, que es de donde se ha originado la política judicial para que primero las mujeres tuvieran una cuota de representación obligatoria en las candidaturas de los partidos políticos. “Estas resoluciones judiciales del Tribunal Electoral avanzan a la legislación en el caso de la Cámara de Diputados y de la Cámara de Senadores a nivel nacional… y las gubernaturas”, expuso.
A su vez, opinó que si bien las amplias expectativas de que una mujer llegue a la Presidencia de México son importantes para el país, señaló que el logro llega tarde en comparación con
Parteaguas
otros países de América Latina.
Por su parte, la politóloga Dayri Jaruny Flores Ramírez externó que el panorama actual también tiene mucho que ver en cómo ha cambiado el contexto en cuestión de género, no solo político, sino también social.
Destacó que el camino que transitaron las anteriores seis candidatas era muchísimo más cerrado porque el contexto era más tradicional. “Históricamente sabemos que siempre, quien ha ocupado los cargos políticos con mayor envergadura ha sido terreno de hombres y si bien estuvieron estas pioneras ahí haciendo espacios, caminos para poder llegar, pues lamentablemente no llegaron”, expuso.
Patriarcado
De hecho, consideró que aunque todavía hay grupos que desestiman la posible llegada de Claudia o Xóchitl a la presidencia, desde el discurso de que hay hombres detrás de ellas, dijo que lo más importante es que se están creando los espacios y que se está haciendo historia.
Al respecto, Azul Aguiar Aguiar añadió que la agenda de género que impulsen como candidatas y de ganar la presidencia, también deberá ser un hito.
Analizó para EL DEBATE que a partir de la evidencia que se tiene, muchas veces no todas las mujeres en el poder avanzan una agenda de género. Por lo anterior, consideró que es importante que los movimientos feministas estén siempre al pendiente, como lo han estado hasta ahora, de los avances de la agenda de las mujeres, así como las mujeres, para que presionen a las nuevas lideresas, para que encaminen a abrir más espacios para mujeres.
En este sentido, hizo hincapié en que ni Xóchitl Gálvez, ni Claudia Sheinbaum, han asegurado que vayan a tener una agenda de género, por lo que eso va a representar un trabajo, como ha venido siendo hasta ahora, de diferentes grupos sociales.