El Debate de Guasave

Don Luis aplica el ingenio para superar al covid-19

Él y su familia llegaron a Guasave hace 13 años desde Estados Unidos, y tras aprender a elaborar macetas, formó su patrimonio La pandemia provocó que sus ventas cayeran y buscaran otra opción, pero hallaron en la elaboració­n de tamales otra fuente de ing

- ☰Mayra Casillas @eldebate

Luis Enrique Espinoza y su esposa Diana vivieron cuatro años en Arizona, en Estados Unidos, donde él trabajaba en una compañía que elaboraban tuberías de concreto, todo con el fin de darle una mejor calidad de vida a su familia. Al regresar a su natal Guasave decidió dedicarse a la elaboració­n de macetas, pero por la pandemia optaron incursiona­r también en la venta de tamales, aguas frescas y atole, cuando hace frío.

➤ Comienzo

La pareja llegó a la ciudad de Guasave en el 2008 con la finalidad de establecer­se en un lugar tranquilo y agradable, y para formar un hogar después de tantos años trabajando en el extranjero, pues se cansaron de vivir en un lugar monótono, donde la vida era muy rápida y las distancias muy largas, por eso se mudaron a un lugar chiquito. “Nosotros aquí llegamos en el 2008, ya 13 años, prácticame­nte, pues antes trabajaba en el estado de Arizona, estuve cuatro años en una compañía que elaboraban tubería de concreto de distintos tamaños y formas en una constructo­ra, es de lo que anteriorme­nte vivíamos”, explicó don Luis.

➤ Creación

La elaboració­n y venta de macetas se dio por pura casualidad, cuando empezaron a construir su casa buscando una fachada para la misma, y mientras conseguían los materiales que necesitaba­n, visitó un taller donde vio una maceta muy peculiar que le llamó mucho la atención, y decidió crear una copia exacta. “Nosotros iniciamos elaborando macetas por pura casualidad, salió la idea de elaborarla­s cuando andábamos buscando cómo hacer la fachada de una casa y casualment­e ahí donde andábamos en los talleres, nos tocó ver un molde de una maceta y de ahí me gustó el estilo y empezamos a elaborarlo; es como todo, se batalla hasta que encuentres el punto adecuado en cuestión de las cantidades de cemento, cadenas y grava”, reveló Luis Espinoza.

➤ Actualment­e

Aproximada­mente tiene 11 años elaborando macetas de distintos materiales y tamaños, pero tuvo que parar la producción debido a la pandemia que estamos viviendo actualment­e, ya que las ventas bajaron drásticame­nte, fue un golpe muy grande para la economía de todos, es por eso que él y su esposa Diana tuvieron que incursiona­r en la elaboració­n de tamales de elote, de puerco y de espinacas, y en el transcurso de las ventas se dieron cuenta de que los clientes solicitaba­n venta de aguas frescas y atole para el frío, ya que por lo general es con lo que se acompaña para comer tamales.

Por eso optaron por vender agua de cebada, tepache y atole, y con esto han podido sobrevivir para sobrelleva­r los gastos del hogar y las colegiatur­as de sus dos hijos, ya que les ha ido muy bien con la venta de tamales, pues cada domingo se instalan todas las mañanas hasta las dos de la tarde en la curva a la salida a Las Glorias, aunque en ocasiones se quedan hasta las cuatro y en el transcurso de la semana venden en su domicilio.

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FOTO: JESÚS LEAL Luis Enrique Espinoza laborando en su taller para hacer macetas.

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