El Debate de Guasave

Andreu traía en la sangre ser mecánico, y lo cumplió

Desde los 17 años empezó su inquietud por prepararse en el Cetis 108, y ahora tiene su propio negocio Detalla que fue un proceso largo para poder llegar a donde está, pero cuando se ama lo que se hace, nada es imposible

- ☰Mayra Casillas @debate.com.mx

Ala edad de 17 años, Andreu Espinoza Leyva experiment­ó su inquietud por la mecánica, debido a que en la preparator­ia Cetis 108 impartían esa clase, ahí es donde nació su travesía para poder cumplir su sueño de tener su propio taller, lo cual lograría a base de mucho esfuerzo. Es por eso que practicaba en un taller diésel de tractores para ganar un poco de más experienci­a, antes de emprender esa aventura por sí mismo.

Inicios

Andreu empezó a practicar con un amigo de su papá por seis años para poder tener la experienci­a necesaria y atender a sus futuros clientes, cuando tuviera su propio negocio. Comenzó desde abajo, primero observaba lo que hacían los grandes, ya que como era muy joven, al principio solo lo dejaban limpiar las tuercas para que fuera aprendiend­o la teoría.

“Yo empecé estudiando en el Cetis 108, aquí en la ciudad de Guasave, desde ahí empezó mi inquietud por la mecánica, practicaba en un taller diésel de tractores y de ahí me vine a un taller aquí en Guasave, y era más de mecánica gasolina, y así fue como empecé. Yo inicié laborando de ayudante, lavando tuercas, empecé desde abajo, de metiche también, dijo entre risas, queriendo aprender, pues trabajaba con un amigo de mi papá que era mecánico diésel y ya él me recomendó con otro, yo trabajaba en El Amole, en el taller que le mencioné, laboré con Manuel Espinoza, alrededor de seis años, tenía como 17 en ese entonces”, destacó.

Capacitaci­ón Espinoza Leyva detalló cómo fueron sus inicios como aprendiz, donde se capacitó con don Manuel, un experto en full injection.

“En el año 2000, el 15 de enero para ser más exactos, empecé ya con mi propio negocio. Anteriorme­nte yo había trabajado en un taller que era especialis­ta en full injection, que era nuevo, para cuando yo entré en ese taller habían hecho cursos de capacitaci­ón de lo que es la inyección electrónic­a, entonces yo trabajaba con Manuel, y día y noche iba a los cursos de capacitaci­ón, cuando yo vi que abrieron ese taller, venían de Estados Unidos, y fui a pedir trabajo, y les dije que no tenía práctica, solo teoría, pero aceptaron y estuve año y medio ahí”, reveló.

“Fui adquiriend­o lo que es herramient­as y equipo, en la noche trabajaba para mí, para adquirir equipo, porque es caro. Los fines de semana me llevaba los trabajos con mi papá, pero entre semana tengo un amigo que se llama Saúl y él me prestaba su taller, y yo ahí hacía los trabajos en la noche”, externó el mecánico.

Realizado Andreu Espinoza y su esposa trabajan en equipo desde que se casaron. “Me mudé con mi esposa y mi primera hija, y ahí arreglamos la casa y a los seis meses empecé a hacer el taller, a un lado de mi casa. Mi esposa me ayudaba mucho en la parte administra­tiva, y poco a poco me fui haciendo de clientes de boca en boca, tratando de hacer las cosas lo mejor posible, antes tenía alrededor de 10 o 15 clientes, cuando yo empecé, y ahora es complicado decir un número exacto, pues son alrededor de 80 o 100 clientes frecuentes, así que creo que mi sueño sí se realizó, comenta.

«Para los jóvenes que quieren dedicarse a esto, tiene que gustarles y dedicarle tiempo, así como actualizar­se» Andreu Espinoza Mecánico

 ?? FOTO: JESÚS LEAL ?? Todos los días Andreu atiende personalme­nte a sus clientes en el taller que formó a base de esfuerzo.
FOTO: JESÚS LEAL Todos los días Andreu atiende personalme­nte a sus clientes en el taller que formó a base de esfuerzo.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico