Contagio de boca en boca
Vivimos en una sociedad que modifica constantemente sus hábitos de consumo, estamos rodeados de productos, mensajes, ideas y contenido digital, una nueva era en la cual evolucionas o desapareces.
¿Cómo lograr que una marca o producto sea contagioso o viral? ¿Por qué algunos triunfan y otros fracasan? Simplemente porque presentan mejores funciones o características, precios más atractivos y tienen una excelente publicidad que la gente termina adoptándolos.
Está técnicamente demostrado que no hay mejor publicidad que la de boca en boca –influencia social-, pues influye entre un 20 por ciento y 50 por ciento, en una decisión de compra, es tan buena que hasta existe una Asociación de Mercadotecnia por Recomendación (Worth of Mouth Marketing Association). Su crecimiento en redes sociales es exponencial, aunque actualmente sólo consume el 7 por ciento de nuestra comunicación diaria. En términos más específicos, un usuario en línea comparte al día aproximadamente 16,000 palabras y se realizan más de 100 millones de conversaciones que involucran diferentes marcas por hora.
Sin embargo, para el profesor Jonah Berger, catedrático de la Universidad de Wharton, experto en el boca a boca, el marketing viral y la influencia social, debemos dejar atrás los factores de desarrollo intencional y planeación inteligente y pasar a descubrir su magnífica propuesta contagiosa, que hace que ciertas ideas o productos se difundan, compartan e imiten más que otros, pequeña gran diferencia entre el éxito y fracaso.
¿Qué factores determinan que se hable más de un producto o idea?
Para que una idea o producto alcance altos nivel de contagio se debe influenciar en seis factores (STEPPS por sus siglas en inglés) que hacen que se hable de las cosas, pues las personas deben sentirse bien frente a los demás al momento de compartir una idea o producto -transmisión social-, el cual genere una conexión o asociación -desencadenamiento-, que sustente y se active a causa de una idea fresca, que se comparta de manera constante y frecuente por haber despertado fuertes emociones –emotivos-, aunado a que sea públicamente visible –públicos-, de igual manera simple, práctico y útil, ya que es más probable que se vuelva contagioso valor práctico- bajo una narrativa atractiva y con información poderosa –historias-. En esta nueva era tecnológica estamos obligados a contagiarnos de una nueva realidad digital y de un marketing viral, sólo aquellos que sean capaces de despertar las emociones de las personas y acercarse a la mente de los usuarios alcanzarán el éxito más allá de lo terrenal.