Itzel Avilez
29 años
Antropóloga social.
Fue parte de la fundación de la Colectiva Feminista de Culiacán en 2014.
Formó parte de Colectivo Feminista Sinaloense.
Cofundadora del círculo de lectura feminista y de reflexión Macheteras que sigue la tradición del feminismo de los años 70 de México y Estados Unidos.
¿Qué es lo más complicado para ti de ser feminista en Sinaloa?
Son varios factores, principalmente dos, primero que honestamente no estamos como muy maduras en el tema del activismo político, en el sentido de que sí ha habido movimientos en Culiacán, particularmente, y desde hace varias décadas, pero honestamente no tenemos la trayectoria de Ciudad de México o de países europeos en los que las legalizaciones son muy distintas, aunque el patriarcado siga existiendo, una sería esa, y las movilizaciones no son masivas aún. Para nosotras implica toda una organización que apenas estamos aprendiendo a llevar a cabo porque además sí tenemos mucho miedo que nos desaparezcan porque no somos 500 ‘morras’ en una manifestación, somos 15, 20, a veces, 50.
Y la violencia generalizada, y ya lo decía Rita Segato, la violencia contra las mujeres queda disfrazada en esta explicación gubernamental de «ah, es que es el crimen organizado» sí, o sea, sí hay crimen organizado, pero el crimen organizado también es misógino, entonces invisibiliza y vivimos estas dobles violencias de ser mujeres pero ser mujeres en un lugar que es tierra de nadie.