'Mejor morir con el estómago lleno que de hambre'
El inminente regreso a rojo del semáforo epidemiológico por la pandemia de coronavirus (Covid-19), traerá consecuencias catastróficas para los comercios incluidos los pertenecientes a grupos de vendedores ambulantes, comentó Juan Curiel, dirigente de una de las organizaciones más grandes.
“Entendemos la situación y estamos platicando con las autoridades, pero también nosotros somos personas que vivimos del comercio. Si se cierran los negocios no vamos a aguantar. Ya pasó una vez y no sirvió de nada”, comentó el líder del Frente
Juan Curiel.
Especialmente en la calle Cuarta de la zona Centro, se congregan muchos comerciantes informales, quienes habían expresado su optimismo cuando el semáforo estaba en amarillo, especialmente cercana la temporada decembrina, pero ahora, temen que no les permitan trabajar, lo que sería desastroso para ellos y sus familias.
“Esperemos que la gente se cuide y las autoridades respondan porque no es que quiera decirlo pero…preferimos morirnos con el estómago lleno que morirnos de hambre”, manifestó el también comerciante.
Según el padrón por parte de la Subdirección de Gobernación Municipal, se habla de entre 180 y 200 vendedores, solo en esta zona, sin contar con los debidamente establecidos como restaurantes, tortillería, carnicerías, de venenos, abarrotes, así como los de ropa y artículos variados.
Actualmente la mayoría de establecimientos, puestos y módulos de venta de todo tipo de artículos están abiertos. Los responsables usan cubrebocas y algunos guantes. En los restaurantes se tiene tapete con líquido sanitizante y se pide entrar con mascarilla que cubra la nariz y boca.