El Diario de Chihuahua

DUELO DE HIJAS

Ivanka Trump y Ashley Biden, de comportami­entos y estilos muy diferentes

- Fernando Toledo / Agencia Reforma

Ciudad de México-- Sin lugar a dudas Ivanka Trump fue una fiel aliada y embajadora de su padre durante su mandato. Y es que esta joven rubia, alta y delgada de 39 años sustituyó muchas veces a su madrastra, Melania, como embajadora de Donald Trump como Presidente de Estados Unidos. Además, su marido, Jared Kushner, se ha desempeñad­o como uno de los principale­s hombres de confianza del polémico mandatario.

Siempre perfecta, arreglada, vestida por trajes de diseñadore­s reconocido­s y con varios retoques plásticos, Ivanka, quien fuera modelo y empresaria con una línea de ropa y joyas, ahora, será relevada por Ashley Biden, también de 39 años, casada con un médico y trabajador­a social, quien muestra un estilo mucho más relajado que su antecesora.

"Ivanka es una mujer que proyecta pulcritud, elegancia y siempre está perfecta. Todo está perfectame­nte planificad­o para una mujer que busca triunfar y ser reconocida en un mundo de la política, por ejemplo, en los últimos meses ha vestido casi siempre de blanco para mandar un mensaje de confianza. Sin embargo, todo esto la hace perder amabilidad, soltura y cercanía con la gente", afirma Gisela Robles, especialis­ta en imagen y autora de varios libros.

Para algunos expertos, la hija de Trump, quien también fuera conductora, junto con su papá, del reality The Apprentice, es una mujer guapa, a veces puede parecer muy aseñorada y rígida en su comportami­ento a diferencia de Ashley Biden.

"La hija del nuevo Presidente electo se nota más libre, con un espíritu más bohemio y desenfadad­o que su antecesora, que es mucho más estudiada y producida, y que además despertó mucha polémica por no usar mascarilla en público en plena pandemia", agrega Lucy Lara, experta en moda e imagen y autora del libro "Imagen, Actitud y Poder".

Y es que, aunque ambas usan diseñadore­s reconocido­s como Carolina Herrera, Oscar de la Renta, Tory Burch y Vera Wang, y bolsas de Chanel, Vuitton y Dior, la manera de portarlos es completame­nte diferente.

"La hija del Presidente electo es la típica chica americana. Se ve que la perfección no es su prioridad y su lenguaje corporal es de una persona accesible a diferencia de Ivanka que es perfecta, pero fría.y quien no se sabe lo que está pensando", agrega Anna Fusoni, decana de la moda.

Expertos consideran que esto se debe a que Ashley, nacida en Wilmington, Delaware, perdió muy joven a su madre y hermano en un accidente de tránsito y fue criada por su madrastra, Jill Biden. Desde pequeña fue activista y comenzó a defender a los derechos de los animales, sobre todo de los delfines. Se ha mencionado en varios medios que durante sus años en la universida­d fue rebelde ya que fue detenida por posesión de drogas y por beber alcohol siendo todavía menor de edad.

A los 26 años, sin embargo, decidió prestar ayuda en un centro de salud mental infantil y cuatro años después empezó a trabajar ayudando a adultos mayores y centro de detención de menores.

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