Encarna Maru la rebelión de las bases que traicionó Corral
maru Campos llega con fortaleza y ventaja a una semana de su cita con el panismo, pese a todos los obstáculos que se le han puesto en el camino, motivados por una irracional determinación oficial de Corral por hacerle daño en su fama pública y en su integridad, mediante triquiñuelas jurídicas de mil tipos, auténticamente furibundo, fuera de sus cabales si es que los tiene.
ha desatado el gobernador los demonios del poder de lo que tanto se quejó en diversos escenarios y momentos en su carrera política.
Con el descaro del más vulgar pragmatismo, moviliza ministerios públicos, jueces de consigna; y cuando no puede, hay berrinches y luego amenazas a la misma judicatura federal, como ocurrió con el Consejero Jurídico, Jorge espinoza, en el Juzgado Cuarto de distrito, de lo cual quedó evidencia por escrito.
es este último episodio epílogo de su descomposición ética, porque el juez de distrito fue removido, sólo con una llamada que suponemos fue del gobernador al mismito Presidente de la Corte. antecedente gravísimo. Si el Consejero Jurídico no tenía vela en el entierro, sin personalidad jurídica alguna, mucho menos el titular del ejecutivo estatal tenía porqué meter las manos. intromisión abusiva e ilegal.
Con ello se demuestra lo que ha venido ocurriendo en un asunto larga y mañosamente manoseado. guardaron los supuestos expedientes incriminatorios durante largos cuatro años en la Fiscalía estatal, ocultándolos de manera conveniente de la vista de la inculpada, para que no pudiera defenderse, y los fueron usando a contentillo para difamar y calumniar, dosificándolos con objetivos de carácter político, para obtener ventajas y beneficios de grupo para una camarilla que se ha entronado en el poder y que lo sujeta con sus mandíbulas como perro al apetitoso hueso.
han probado las mieles del uso presupuestal sin límites, entre sus dedos se escurren 350 mil millones de pesos en recursos federales y estatales a lo largo del quinquenio, más el uso discrecional de créditos a corto plazo y las jugosas comisiones por reestructuración de 48 mil millones de pesos. Tienen sus manos embadurradas y escurriendo miel, escatológicamente hablando, por eso quieren perpetuarse en la gubernatura. están dispuestos a pasar por encima de quien se oponga a tal pretensión, aún y cuando se vulneren los principios del partido y se maltrate a la militancia auténtica que tantas batallas ha dado.
no les importa asumir una postura francamente opuesta a lo que al menos Corral ha sostenido en sus aventuras políticas, en las cuales se envuelve en ideales quijotescos, que defiende y se desgañita con formidable capacidad histriónica, y que hoy simplemente desecha con increíble e inusitada facilidad.
Como actor de teatro, usa una máscara hoy y mañana su antítesis, aderezada con rictus maquiavélico, traicionero.
debajo de la careta, tiene por ahí guardado, aunque no lo manifieste, un cierto resquemor en sus adentros. La inefable Ley del talión ¿Qué tal si hay una revisión a fondo que ponga en evidencia los abusos de poder, el uso indebido de recursos, las corruptelas, en asuntos que no ameritan siquiera profundidad, porque están a la vista... Comunicación Social, Salud, Secretaría de Seguridad, los recursos del Covid, gastos en vuelos, comilonas, etc? algunos, los que firman esas disposiciones pecuniarias, caprichosas, no han de poder siquiera dormir porque serán delatados y entregados en la primera de cambio. Por eso la desesperación es enfermiza.
Con el rostro pintado de los colores del Pan, Javier Corral, peleó contra Ricardo anaya por la presidencia nacional de su partido, convocando a una auténtica rebelión de las bases, desde Yucatán hasta Baja California.
Pretendió convertir la irritación en movilización, para evitar la continuidad de lo que llamaba “el consorcio”; en suma, recuperar aquel espíritu altruista, “cuando decidimos dejar la comodidad de la casa”.
Fue en Puebla donde en particular se concentró en sus ataques, todos ellos dirigidos al gobernador panista en turno, Rafael moreno Valle, en contra de quien no escatimó adjetivo alguno.
moreno Valle manipuló la dirigencia panista; moreno Valle encarceló opositores panistas; moreno Valle era el centro maléfico de un panismo rancio, que torció los principios.
hoy dicho panista está muerto. el presidenciable falleció cuando ocupaba la coordinación del Pan en el Senado, junto con su esposa, la gobernadora electa por Puebla, en un “accidente” de helicóptero, pero Corral parece haber reencarnado todos esos vicios de los que se quejaba.
hizo a su coordinador de campaña, Fernando Álvarez monje, presidente estatal del Pan durante los primeros dos años de gobierno, para consolidar la estructura y evitar sobresaltos. Tenía que operar las elecciones intermedias en 2018 para preparar la sucesión en 2021.
Fue todo infortunio. Álvarez monje jamás bajó a la militancia, jamás asumió un liderazgo que implicaba, autonomía, independencia, pensamiento propio, y fundamentalmente, defensa a los ideales del partido. Fue sumiso de principio a fin, y por supuesto, salvo Chihuahua capital -léase maru- y algunos triunfos esporádicos, la base electoral panista se vino a pique.
Corral lo premió con una diputación y en su lugar puso a la Secretaria de Fortalecimiento municipal, Rocío gallegos, quien es reflejo fiel de la incapacidad de Álvarez monje, pero desde ahí, desde la manipulación caprichosa del partido, ha tratado de descarrilar a maru, mediante reforma electoral y coalición a modo.
ningún espíritu altruista en Corral ni en sus operadores partidistas. Se engolosinaron con los sueldazos, las comilonas, las casotas, las camionetotas, esas Suburban blindadas de millones de pesos, que se han dado el lujo de rechazar porque traen biseles que no les gustan, ni siquiera pagadas con dinero del erario público, porque aún las deben.
Por supuesto, prefiere el gobernador la comodidad de su casa en Chihuahua, en Juárez, en el Paso, en mazatlán, o en la Ciudad de méxico, que asumir su alta responsabilidad como primer panista, con todo lo que ello implica ideológica y políticamente.
Prefiere hundirse más en el pantano de la realpolitik. es fiel retrato, sin duda, de los demonios que rabiosamente denunció en su momento, y que encarna con singular desenvolvimiento.
Tiene motivos para estar molesto el gobernador. Su delfín, involucrado en aquellos idus que denunciaba -una muestra más de su incongruencia- nada más no avanza.
Le molesta en particular que maru Campos, en su camino a la candidatura, sea recibida con muestras de cariño y afecto de verdad por la militancia y simpatizantes panistas, rompiendo con la operación tenebrosa en su contra.
el castigo la ha hecho crecer. Los medios de comunicación le han abierto las puertas de par en par, aquellos que fueron vilipendiados y aun los que fueron arreglados a medias con dádivas, con spots a tarifa irrisoria, grosera. el trato ha sido de lo mejor, resistiéndose a las llamadas amenazantes que exigían se cerraran los espacios.
Precisamente cuando él operaba con su camarilla el embate contra el aparato judicial federal, maru saludaba de mano y comprometía votos con la militancia a unos cuantos kilómetros del lugar donde vociferaba el desencajado Consejero Jurídico, Jorge espinoza.
ella no se ha detenido ni un día, aun y cuando le son enviados mensajes directos e indirectos, de que será aprehendida, que va a ir a la cárcel, que no llegará al domingo. La última estratagema de quitar a un juez le dará incluso los días suficientes para llegar a la elección del próximo domingo, a su cita con las bases que se rebelan en contra del tirano despótico, inmerecidamente panista.