CON ANSIAS, ESPERAN REGRESO DE COMPRADORES MEXICANOS
El Paso, Tx.– Antes de que la pandemia llevara al cierre de la frontera entre Estados Unidos y México a los turistas, New World by Juan’s, una tienda de artículos para el hogar a unos pasos del puente internacional que conecta El Paso con Ciudad Juárez, empleaba a siete personas. Hoy son tres.
Y cuando los casos de Covid-19 volvieron a aumentar el verano pasado, el propietario cerró una de sus tres tiendas en El Paso, que empleaba a seis personas.
Con el anuncio de la semana pasada de la administración de Biden de que reabrirá las fronteras terrestres a todos los viajeros vacunados a partir del 8 de noviembre, los dueños de negocios que han estado perdiendo dinero y los empleados que están ansiosos por volver a trabajar a tiempo completo están contando los días hasta que puedan dar la bienvenida a sus mayores gastadores: los turistas mexicanos. “Estamos felices porque la gente de Juárez está regresando”, dijo Miguel Reséndez, gerente de New World by Juan’s. Dijo que la reapertura de los puentes justo a tiempo para la temporada de compras navideñas será un alivio bienvenido para las empresas fronterizas.
En el mismo anuncio, el Gobierno federal dijo que, a partir de enero, las personas que viajen con fines esenciales, como estudiantes, conductores comerciales, ciudadanos estadounidenses y trabajadores de la salud, deberán comenzar a mostrar prueba de vacunación en los cruces terrestres para ingresar a Estados Unidos.
En marzo de 2020, en un esfuerzo por combatir la propagación de Covid-19, la administración de Trump cerró las fronteras terrestres a todos menos a los viajeros “esenciales”. Desde Brownsville hasta El Paso, los cruces de peatones en los puertos de entrada se redujeron drásticamente, según las estadísticas del Departamento de Transporte de Estados Unidos.
En El Paso, hubo 3 millones de cruces de peatones en 2020, una caída del 60 por ciento en comparación con el año anterior. En Brownsville, los cruces de peatones se desplomaron un 53 por ciento entre 2019 y 2020. Ambas ciudades vieron cómo los cruces de vehículos se redujeron aproximadamente a la mitad durante el mismo período.