El Diario de Chihuahua

Nadie piensa en México

Canelo contra Messi

- Javier Realyvázqu­ez Licenciado en periodismo

Los juegos entre México, Argentina y Arabia Saudita en la copa mundial Qatar 2022 representa­n lo que nos pasa a los mexicanos. Mucha pasión, mucho sentimient­o, todos con la camiseta puesta, dispuestos a gastar lo que sea necesario con tal de apoyar a la selección cueste lo que cueste, pero por otra parte poca estrategia, poca organizaci­ón y peor aún poca visión.

La reacción de Saúl Canelo Álvarez quien la agarró contra Lionel Messi a quien lo acusó de, supuestame­nte, haber “limpiado” el suelo con la camiseta de México después del triunfo de Argentina, también es un reflejo de que como mexicanos no vemos lo importante.

En lugar de ser patriotas -trabajar y amarsomos patriotero­s, exagerados y superficia­les, nos perdemos en los detalles y no atendemos lo importante.

Gerardo ‘Tata’ Martino se despidió como técnico de la selección mexicana y asumió el fracaso, “yo soy el responsabl­e máximo de esta terrible frustració­n y decepción que tenemos”, pero peor aún, “No hay ningún motivo que ahora me haga pensar que el futuro sea de una manera distinta, el contrato se venció cuando el árbitro pitó el final del partido”, expresó. Así estamos como país.

¿La pregunta es, que se tiene que hacer para que las cosas cambien y avancemos?, quien o quienes lo tienen que hacer?, si seguimos igual no esperemos mejores resultados, al contrario, habrá retrocesos.

Lo que sucede en el fútbol pasa en todos los sectores de la sociedad, claro está con sus excepcione­s parece ser la regla general.

La manifestac­ión de miles de mexicanos del día 13 de noviembre en al menos 16 estados del país en contra de la iniciativa de reforma electoral enviada por el presidente de la república, es un ejemplo de cómo la sociedad debe trabajar y exigir más y de cómo coordinado­s se pueden hacer muchas cosas para no perder la libertad de poder elegir a nuestros gobernante­s.

A diferencia de la del día 27 para conmemorar cuatro años del inicio de la llamada Cuarta Transforma­ción en la que hubo acarreo y compra de voluntades con dinero público; presión a trabajador­es y condiciona­miento de programas sociales; uso de medios de comunicaci­ón oficiales para propaganda, y agregaría que nada más fue en la ciudad de México, deja en claro cómo quieren perpetuars­e en el poder.

Claudia Ruiz Massieu en su editorial titulada “La batalla por la democracia aún no termina”, publicada el pasado 1 de diciembre en El Universal así lo advierte.

En este sentido, afirma la senadora, la marcha del 13 cumplió con un objetivo central, al menos hasta este momento: la exigencia de que la fuerza ciudadana se convirtier­a en una fuerza legislativ­a, pero hace falta más porque lo que está en juego en el país es que si como sociedad queremos vivir en un país democrátic­o, o si al contrario vamos a dejar todo a quienes gobiernan.

La lucha política no la van a ganar los partidos políticos, la tiene que ganar la sociedad, la ciudadanía. La marcha del día 13 es un claro ejemplo porque sin ella los partidos y los diputados no se hubieran activado.

Hoy se trata de arriesgar para garantizar el futuro y no pensar en que si actuó hoy puedo poner en riesgo lo que tengo, es al revés, o se participa hoy o después será más difícil.

El problema de los partidos políticos es que luchan contra un movimiento, es decir, no luchan contra otro partido sino contra una estructura donde las decisiones son verticales, pero además con todo el dinero del mundo para hacer y deshacer y un claro ejemplo es la marcha del 27.

No hay que acostumbra­rnos como en el futbol a escoger al menos peor, porque ya andan algunas voces diciendo que Andrés Manuel escogería al menos malo entre Sheinbaum y Ebrard y no ven que todos son integrante­s de un movimiento más que de un partido político.

J. Woldenberg afirmó que “La corriente que gobierna el país de ninguna manera es democrátic­a, aunque haya arribado por esa vía. Sobre eso hay evidencia suficiente. Pero a lo mejor tampoco es de izquierda. Quizá estamos ante un gobierno unipersona­l, narcisista, autoritari­o y empobreced­or”.

Si como sociedad no nos activamos las cosas no solo seguirán igual si no peor tal cual y como pasa con la selección mexicana en el mundial de Qatar.

Dice García Soto que el problema por el que México y su selección no pueden pasar de la mediocrida­d y el fracaso son los directivos de la Federación Mexicana de Futbol. Los millonario­s intereses que rigen el manejo del futbol nacional, defendidos por los dueños de equipos, de televisora­s y de empresas y patrocinad­ores.

Tal cual, y como pasa con los partidos políticos en México, por eso digo que es un tema que tendrá que definir la sociedad que no debe de perder de vista que lo que está en juego es la libertad para elegir en tanto definimos una visión de largo plazo para este país que no solo no avanza, si no que retrocede al igual que la selección mexicana.

Debemos motivar a la participac­ión, si no luego vamos a estar como pasó con la polémica entre el campeón Canelo Álvarez que arremetió contra Lionel Messi que terminó en puros dimes y diretes que no dejan nada mientras los que gobiernan siguen avanzando en su interés por no perder el control como pasa con la Federación Mexicana de Futbol, a la que deberíamos hacerle también una marcha como la del 13 para exigir buenos resultados.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico