Ha enviado Chihuahua 413 millones de m3 al río Bravo
Como parte del Tratado que se tiene con Estados Unidos: Conagua
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que al pasado 18 de febrero de 2023, se han enviado a la cuenca baja del Río Bravo un total de 413.401 millones de metros cúbicos de agua de las distintas presas y ríos de Chihuahua como parte del Tratado Internacional de Límites y Agua que se tiene con Estados Unidos.
En la actualidad la entidad se encuentra en el año 3 del ciclo 36 –que es de cinco años-, donde se tiene un déficit de 540 millones de metros cúbicos de agua pendientes por entregarse durante éste y los siguientes dos años.
La dependencia federal enfatizó que el volumen a contabilizar en el Río Bravo depende de las aportaciones que originen las cuencas tributarias definidas en el tratado de 1944.
Ante el rechazo de líderes campesinos y legisladores federales de que se envíe agua a la cuenca baja del Río Bravo, específicamente de las presas, la Conagua no emitió ayer una respuesta.
El Diario publicó ayer que a pesar de que inició el ciclo agrícola con el 100 por ciento de los volúmenes de riego aprobados, los productores agrícolas se encuentran expuestos a las inclemencias del tiempo, dependen de la lluvia y no se justifica de ninguna manera el trasvase a distritos de riego del Bajo Bravo.
Así lo aseguró el diputado federal Salvador Alcántar, presidente de la Asociación de Usuarios de Riego del Estado de Chihuahua (AURECH), quien dijo que si bien, cuentan con buena captación de agua en las presas, por las lluvias del año pasado, se negaron los trasvases al Consejo de Cuenca que a través de un grupo especializado y una metodología de escenarios simulados.
Informó que durante la reunión con las autoridades federales, se rechazaron los criterios matemáticos que determinaron de manera teórica que se cuenta con el recurso hídrico suficiente para el trasvase.
Expuso que en los ciclos de 2021 y 2022 contaron sólo con el 50 y 25 por ciento de las hectáreas autorizadas para riego, por lo cual el 2023 será un año de recuperación económica, aunque no se puede cantar victoria, porque las heladas tempranas, el granizo y en general los fenómenos climatológicos extremos ponen en riesgo la producción.