'Entrena' la boca
Cuando de llevar una vida saludable se trata no basta con ejercitar los músculos, hace falta también “entrenar la boca”.
Los expertos aseguran que de un 60 a un 70 por ciento del objetivo de una persona que hace ejercicio depende de la alimentación, ya sea bajar de peso, incrementar masa muscular o mantenerse en buena condición.
Un claro ejemplo es el de la gente que suele entrenar a diario, pero que padece sobrepeso.
Si no ajusta su alimentación, aunque haga ejercicio, será muy difícil que elimine los kilitos de más.
Es una creencia muy popular entre quienes entrenan a diario la de permitirse comer cualquier tipo de comida, en especial la de alto contenido calórico –como pizza, frituras, refrescos y dulces–, sólo porque están haciendo ejercicio.
Sin embargo, también hay quienes no pueden hacer a un lado con facilidad este tipo de comida porque están muy acostumbrados a consumirla.
La dieta perfecta para mantener la figura y la salud
Es ahí donde entra la otra parte del entrenamiento de una persona saludable: la de incorporar alimentos que le ayuden a estar en forma.
Aquí es importante aclarar que una alimentación adecuada debe ser variada; es decir, incluir carbohidratos, proteínas y grasas.
Cada grupo tiene una función en el cuerpo, la cual es más importante cuando se trata de alguien que se ejercita de forma regular, pues una alimentación adecuada optimiza el rendimiento deportivo.
Los carbohidratos aportan, principalmente, la energía que se necesita para entrenar, las proteínas ayudan a construir y regenerar los tejidos del cuerpo afectados por el esfuerzo físico y las grasas integran la membrana de las células y permiten la asimilación de vitaminas.
Asíesquenosedebeprescindirde ningunodeestosgruposdealimentos, pero sí hay que ajustar las cantidades que se come de cada uno.
Buena parte de quienes deciden cambiar su alimentación toma decisiones radicales; es decir, elimina de un día a otro la ingesta de refrescos, golosinas, frituras y comida rápida.
Esto puede funcionar, pero requiere una férrea fuerza de voluntad y será muy difícil de cumplir para quienes están acostumbrados a comer de forma poco saludable.
Estudios destacan que el cerebro se programa para comer de cierto modo, incluso algunos especialistas tratan como una adicción el consumo de alimentos como el azúcar.