AGACHADOS Y AGACHONES
Se consciente donde está tu cabeza en el espacio. Para seguir disfrutando de tu celular, solo asegúrate de que tu cabeza está arriba”
Kenneth Hansraj, en The Washington Post
¿Podríamos cargar un niño de 8 años arriba de nuestro cuello y espalda durante unas 6 horas al día? Un menor de esa edad pesa un promedio de 26 a 27 kilos. Vamos por las calles, en el auto o estamos en casa y llevamos sobre los hombros el equivalente a un infante.
¿Cuántas veces al día agachamos la cabeza unos 60 grados para revisar un mensaje o escribir un texto en el teléfono celular?
Cada vez que hacemos ese movimiento -ya compulsivo e impulsivo- a cada determinado número de minutos, lastimamos la columna cervical y el cuello aplicando una presión hasta de 300 por ciento de lo normal. Son kilos extra y luego andamos todos chuecos o contractuados, de mal humor, quejándonos de todo y lanzando maldiciones por nuestro cuello adolorido o por dolores en la columna. Esto es conocido como el text neck o cuello roto.
Pero seríamos incapaces de moderar el uso del celular. Primero muertos antes de limitar el uso del celular. Según especialistas1 consideran ese dolor de cuello un trastorno típico del siglo XXI totalmente asociado al uso de los celulares y creen que se está tornando en una epidemia global. Los síntomas están muy ubicados como la rigidez del cuello, dolor de hombros y cefaleas –dolores de cabeza recurrentes y uno de los trastornos del sistema nervioso- que se desencadenan por permanecer mucho tiempo en una postura con el cuello inclinado hacia abajo.
En artículo de El Clarín, el doctor Dean L. Fishman, médico quiropráctico y fundador de The Text Neck Institute, de Estados Unidos de Norteamérica detalla que “teniendo en cuenta que hay más de 7 mil millones de teléfonos conectados en todo el mundo y que una persona promedio pasa alrededor de 4 horas usando sus dispositivos, podemos decir que el text neck es una epidemia global. Vemos un aumento entre los pacientes más jóvenes que llegan a buscar tratamiento y asesoramiento por dolencias que hace unos años eran consideradas inusuales para ese grupo de edad. Atendemos pacientes jóvenes con dolores de cabeza, cuello y hombros crónicos, además en las radiografías vemos un inicio más temprano de presentaciones artríticas”.
Cada vez que agachamos la cabeza para revisar un mensaje y sobre todo para textear o escribir en la pantalla del teléfono celular, aplicamos una presión extra al cuello y cabeza que puede ser más de 20 kilos2.
Constantemente nos quejamos de dolores de cabeza y cuello y se lo queremos achacar a mal dormir o a almohadas incómodas, pero estamos equivocados y no tomamos en cuenta que, durante el día, usamos dispositivos digitales, principalmente el celular, hasta por 8 horas, la tercera parte de un día y su noche completa.
Por lo general, la cabeza de una persona adulta pesa entre 5 y 7 kilogramos y ese es el peso que las vértebras cervicales están acostumbradas a soportar, pero cuando agachamos la cabeza para ver el celular la inclinación es entre 45 y 60 grados y la presión puede superar los 20 kilos.
En México, aproximadamente 50 por ciento de la población general alguna vez en su vida sufrirá dolor de cuello (cervical) debido a la mala postura al sentarse o al usar dispositivos electrónicos, como celulares, computadoras y tabletas3. Esto confirma la preocupación por la extensión de un malestar que afecta cada vez más, pero, sobre todo, que nos mantiene agachados, viendo hacia abajo, con la mirada puesta en el celular, castigando con presión y peso extra al cuello.
Por eso, cada vez que nos agachamos a ver el celular aplicamos un peso extra al cuello y a la columna más de 20 kilos a lo que se conoce como el síndrome “text neck”, que sería como “cuello de texto” o también se le conoce como “cuello roto”4, por ese pequeño gesto de inclinarnos a mirar el teléfono que parece insignificante, pero hace que los músculos posteriores del cuello trabajen mucho al tener que soportar más peso. De este modo, “cada vez que enviamos un mensaje cargamos una presión en las cervicales equivalente, como lo mencionamos al principio, a llevar un niño de 8 años alrededor del cuello varias horas al día y hay que tener en cuenta que miramos el celular una media de 150 veces cada jornada”.
Para algunos médicos es como una nueva pandemia por el creciente número de personas que padecen este síndrome identificado por las contracturas que aparecen debido a la tensión a la que se somete a los músculos del cuello y cabeza.
Ya es considerada esa lesión como “estrés repetitivo y dolor debido a la posición reclinada del cuello durante el uso excesivo de celulares, tablet y laptop”. También la conocen como “turtle neck posture”, algo así como postura de cuello de tortuga por la pérdida de la curva natural de la columna cervical que incrementa el peso que soportan las articulaciones cervicales.
Más explicación fisiológica: la columna cervical soporta el peso de la cabeza, esta incrementa en relación directa a los grados de flexión de la cabeza desde 5 kilos en la posición anatómica con 0 grados de inclinación. Cuando está inclinada 30 grados la presión es de 18 kilos y a los 60 grados el peso es de unos 27 kilogramos.
Otra expresión muy diferente a mantener la cabeza agachada según Pedro Rangel5 quien considera que estar agachados es un empoderamiento. Dice “hoy en el mundo somos miles de millones de personas las que vivimos con las cabezas agachadas mientras usamos nuestros teléfonos. Empoderados con celular en mano, la era de las mordazas, el silencio y la resignación ha terminado. Hoy agachamos la cabeza y levantamos nuestra voz; hoy agachamos la cabeza y derrocamos gobiernos; hoy agachamos la cabeza e impulsamos leyes, organismos protestas, luchamos por nuestros derechos, nos informamos y hacemos comunidad”, pero también analiza los riesgos como que “en su naturaleza multitudinaria, la revolución de las cabezas agachadas contiene la semilla de su propia destrucción: si antes la voz de las mayorías se controlaba mediante el imperio del silencio, ahora se fractura y sofoca con el ruido y la desinformación”.
Pero ¿qué recomiendan los especialistas para no sufrir el enorme peso en nuestros cuellos cada vez que revisamos el celular?
Proponen mirar hacia abajo en el celular sin necesidad de doblar el cuello. Se puede levantar el teléfono con las manos a la altura de la cabeza debido a que por cada pulgada de la cabeza que se inclina hacia adelante, la presión sobre la columna vertebral se duplica6.
Sugieren levantar las manos y no bajar la cabeza, manteniendo 0 grados de inclinación del cuello y con el celular al nivel de los ojos no pasa nada.
En la década de los setenta, fueron famosas las historietas del caricaturista Rius tituladas Los Agachados de crítica social con la visión de sumisión de los mexicanos y medio siglo después se reedita, pero en la realidad, el fenómeno de los agachados por el celular. Agacharse es una actitud de doblar la cerviz, en una muestra de dominio. Hoy nos inclinamos y agachamos ante un aparato.
Vamos por el mundo cargando 25 kilos sobre el cuello y la columna, pero somos incapaces de disminuir el uso del celular.
Somos los agachados. De homo erectus hemos retrocedido fisiológicamente a ir por la vida con la cabeza gacha, con una inclinación hasta de 60 grados imprimiendo un peso extra hasta de 27 kilos.
Y como vamos agachados, no vemos ni nos interesa por donde caminar. Si vamos agachados, somos agachones.
Pero, antes muertos o torcidos del cuello que limitar el uso del celular…
1 https://www.clarin.com/tech/text-neck-cuello-dolorcabeza-esplada-salud-tecnologia_0_syuu9fdqg.html 2 https://www.infosalus.com/salud-investigacion/ noticia-sindrome-text-neck-asi-afecta-escribir-smartphonecolumna-20210306082941.html 3 La mitad de los mexicanos, susceptible a dolor de cullo por usar dispositivos electrónicos, boletín UNAM-DGCS-352, 2 de junio de 2018 4 FERNANDEZ Vallejo, Marta (2022) Móviles, el síndrome del cuello roto, https://www.heraldo.es/noticias/ salud/2022/11/13/salud-moviles-lesiones-cuerpo-síndrome-cuello-roto-1611886.html 5 RANGEL, Pedro (2023) La revolución de las cabezas agachadas. El poder de transformación y los riesgos de los teléfonos móviles y las redes sociales, editorial Porrúa, México 6 https://www.aepsal.com/inclinar-el-cuello-para mirar-elmovil-supone-un-sobrepeso-de-7-a-22-kg-en-las-cervicales/ html. jcontreraso@uach.mx