PRESIDENTE: ¿PODRÍA TRATAR ASÍ A TODOS?
Hace un par de semanas trascendió la irrupción de un joven en la mañanera, acercándose al mandatario federal; curiosamente, burlando los altos filtros de seguridad y sin ninguna acreditación como las que obtienen los medios de comunicación que ingresan, que no son todos los que lo solicitan y quienes tienen que llegar antes de las 5 a.m. para estar en la conferencia de prensa matutina.
Ante la mirada atónita de los medios de comunicación, el presidente Andrés dio la mejor postal preelectoral: un mandatario con un semblante atento y sensible a la población, como ese joven que se acercaba a pedir su auxilio. Días después de ese evento, se repitió una escena similar, ahora con un periodista acreditado para la mañanera, quien se hincó frente a Andrés Manuel para suplicar la palabra.
En ambos casos, el presidente dio un trato preferencial; quizás fueron escenas orquestadas, quizás no, pero se robaron la atención del mandatario federal. Sin embargo, hay millones de mexicanas y mexicanos afuera del Palacio Nacional que piden un minuto con el presidente con esa cercanía.
Así podría tratar el presidente a las miles de personas que buscan el apoyo para encontrar a sus familiares desaparecidos; lo mismo que las mujeres y hombres que claman un espacio para pedir el esclarecimiento de miles de casos de feminicidios, de tantas mujeres que no han regresado a sus hogares, dentro o previo a su sexenio; presidente, ¿Podría tratar a todos así... como a ese joven al que escuchó detenidamente?
De igual forma con los cientos de padres y madres de familia que piden una audiencia con quien pueda apoyarles con el regreso de los tratamientos para que sus hijas e hijos se recuperen de padecimientos crónicos como el cáncer; con las casi 200 mil víctimas mortales del covid19, que creyeron en la fuerza moral y no de contagio del presidente o que tuvieron fe en las estampitas religiosas; presidente, ¿Podría tratar a todos así... como a ese periodista que se le postró a sus pies?
También podría escuchar a más de un millón de MIPYME'S que se vieron obligadas a cerrar sus puertas, impactando en la economía e incrementando el desempleo en niveles de más de 4 millones de personas; a esos emprendedores a quienes se les retiraron todos los apoyos y se les ha negado alguna exención en sus contribuciones fiscales; presidente, ¿Podría tratar a todos así... como le conmovió el joven que se le acercó intempestivamente en la mañanera?
Lo mismo puede hacer con las y los productores agropecuarios en la región centro-sur en Chihuahua, a quienes se les condenó con la escases alimentaria y al fracaso económico de los municipios dependientes de los distritos de riego a los que les proveen agua las presas "La Boquilla" y "Las Vírgenes"; a las cientos de familias que se quedarán sin sustento por el colapso paulatino de todas las actividades económicas por el alto nivel de dependencia a la agricultura; presidente, ¿Podría tratar así a todos... como le concedió la palabra al periodista que le rogó su atención?
Vaya contradicción en los tratos; una incongruencia en la atención del presidente, privilegiando la solución individual y negándola en el interés colectivo, porque cuando se trata de muchos es "politiquería", pero si se trata de uno merece su total atención frente a las cámaras. Hay tanto que el presidente ha dejado de atender, quizás por capricho, por desconocimiento, desinterés o porque no representa mucho en votos; sin embargo, así sea mucho o poco lo que represente, la atención al periodista o al joven nos confirmó que su palabra lo puede todo para resolver los problemas de las y los mexicanos, o quizás la negación de los mismos.