Cuestiona obispo de El Paso rechazo de inmigrantes ‘pobres’
Frente a cientos de inmigrantes que ayer se hicieron ciudadanos de este país, el obispo de El Paso, Mark J. Seitz, cuestionó las medidas que condicionan el ingreso al país por el nivel económico y educativo.
Seitz, invitado especial de la ceremonia de naturalización realizada por el Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) para mil 117 inmigrantes, arremetió contra leyes que ”violan la dignidad humana”.
El discurso del obispo se contrapone a la política de la administración Trump, que actualmente promueve un plan para recortar la migración legal del país a la mitad, implementando un sistema más competitivo, basado en las aptitudes y educación del solicitante, no en relaciones familiares aquí, como hasta ahora.
“Todos tenemos derecho a superar nuestras vidas queriendo venir a este país. Todos los inmigrantes deberíamos tener el mismo derecho de ingresar al país, sin cuestionar cuánto estudio o cuánto dinero tenemos. Todos somos iguales y todos tenemos los mismos derechos”, dijo.
Aclaró además que los inmigrantes debían ser tratados con humanidad, que no deben ser explotados, ni ser culpados por los males sociales y económicos.
El obispo católico explicó que intervenir en temas políticos en diferentes escenarios es parte de la tradición de la religión que profesa, y que sus líderes tienen la responsabilidad de desempeñar un rol en la vida política de cualquier nación.