Nada escapa al grafiti en el Centro
Trabajadores y comerciantes se quejan de que lo borran y al día siguiente aparece
Señalética, paredes, banquetas y puertas de negocios “grafiteadas” es un panorama común en el que trabajadores y comerciantes de la zona Centro dicen vivir todos los días.
“En la mañana llegamos y ya está todo rayado, aquí nomás uno es trabajador, pero los dueños a cada rato están a pinte y pinte”, expresó un obrero de la zona.
En un recorrido por El Diario se apreciaron grafitis de todos tamaños, formas y colores a lo largo y ancho de la zona, en áreas tanto pequeñas, como grandes, ejemplo de ello es la nomenclatura en el túnel de la avenida 16 de Septiembre.
Entrevistados mencionaron que a pesar de llamar a la Policía nadie interviene, y cuando acuden a abrir, sus negocios están vandalizados, por lo que optan por almacenar botes de pintura y thinner para ellos mismos quitar las “pintas” que realizan vándalos durante la noche.
“Yo limpio mi parte, lo que me toca, porque me han estado grafiteando y compro mi thinner y estoy limpiándo lo que puedo pero en las bardas se absorbe la pintura y hay que echarle más y más”, dijo un vendedor.
Explicó que la vigilancia en el sector es escasa y a veces nula, ya que incluso hay personas que se orinan en las entradas de los negocios y nadie ve nada.
“Así se mantiene, no tarda uno en arreglar cuando ya otra vez, y aquí no hay vigilancia”, mencionó y agregó “ya está uno cansado de luchar contra todo eso, ya nada más lo que le queda a uno es cuidarse en sus localitos”.
También destacó que es durante la noche donde no sólo maleantes aprovechan para rayar, sino que en las mañanas se topan con paredes tapizadas de publicidad.
Afectados mencionaron que para todos, esta es una situación insostenible, pues además de que deben invertir dinero extra para corregir averías en cada uno de sus locales, da mal aspecto a la ciudad y a los visitantes que vienen como turistas.
“Parece que nos estamos acostumbrando a vivir así y eso es muy grave, las generaciones que ya pasamos tratamos pero ¿y los jovencitos?, les tocará una ciudad fea”, señaló.
En algunos lugares, por debajo de los grafitis se pueden apreciar capas de pintura que tapan marcas anteriores.