El Diario de Nuevo Casas Grandes
Bostezos del león
Platicando con un joven que vende revistas y periódicos en un puesto en el centro de la ciudad, me dijo que el soñaba con ser regidor. Luego me preguntó que si yo que soñaba ser cuando era joven. Le expliqué que a mis trece años deseaba ser alpinista para llevar a la cumbre del Everest. En 1953 el neozelandés Edmund P. Hillary es el primero en llegar a la cumbre del Everest, acompañado por el nepalés Tenzing Norkay.
El joven ante mi explicación se quedó un rato pensativo y luego preguntó: ¿ y qué fue lo que ganó por llegar a la cumbre del Everest por primera vez? Expliqué que lo primero que ganó fue la satisfacción de ser un humano realizado, un ser humano convencido de enfrentar cualquier reto por imposible que parezca, saborear con satisfacción auténtica ser un triunfador. Lo que no logran los regidores ni ningún político: Que solo son acomodaticios.
Una señora me comentó que ante la pregunta de Peña Nieto: ¿Usted que haría para evitar el gasolinazo? Pues yo lo que haría si fuera Presidenta de la República liquidaba de inmediato a la cámara de Senadores, a la cámara de diputados, a los magistrados, a los partidos políticos, a los regidores, síndicos, etc., les rebajaba el sueldo a los gobernadores, presidentes municipales y suspendía las millonarias pensiones a ex presidentes, ex gobernadores, ex magistrados, ex rectores de universidades, etc.
Un ciudadano que fue militar hace muchos años me comentó que parece que por fin ante el gasolinazo el león está despertando.
Se refería a las enormes protestas que hay en toda la nación por el alza de los precios de los energéticos, de los impuestos, del alza de los alimentos, etc.
Le expliqué que tomara con calma los acontecimientos pues todo lo que está sucediendo esta mediatizado por los grandes grupos de poder.
A mi en lo personal me tocó ver un pequeño grupo de jóvenes protestando en la calle con una manta que decía: No al alza de los impuestos Me llamó la atención que la que dirigía el grupo era una hermosa chica con evidente entusiasmo de contagiar a la ciudadanía para despertar al león dormido que llevamos dentro.
En cuanto vi esta manifestación recordé el movimiento estudiantil del 68. Recordé que en una foto que vi de una manifestación de estudiantes de la UNAM del 68 entre ellos iba el Dr. Carlos Sáenz, entonces estudiante de Veterinaria de la UNAM.
De NCG participamos algunos jóvenes en el movimiento estudiantil. En aquel momento parecía también que el león dormido estaba despertando, es decir, el pueblo estaba despertando ante la terrible dictadura democrática del sistema fallido del sistema político mexicano.
En estos días platicando con varios ciudadanos con respecto de la situación corrompida del sistema político mexicano la pregunta que surgía era ¿Cómo cambiar un sistema económico de una sociedad egoístamente materialista?, en donde el caos a sido el sistema propicio para el desastre, porque ciertamente a río revuelto ganancia de políticos y pescadores de millonadas.
¿Quiénes son los beneficiados en el caos económico y social? Pues principalmente los grandes empresarios, los grandes financieros y los políticos que están a su servicio.
Comentaba con un ciudadano el detalle interesante de cómo las colonias mormonas y las colonias menonitas están mejor organizadas que nuestras poblaciones hispano mexicanas. Por ejemplo en la Colonia del Valle de menonitas es una Colonia ejemplar bien organizada, no hay presidencia, no hay tránsito, no hay policías, tampoco hay licorerías, ni cantinas, ni centros nocturnos, no hay marchas de protestas, lo que hacen es prevenir las consecuencias de un sistema político caótico y toman las medidas necesarias en silencio.
La última vez que fui a hacer un trabajo de pintura, mi cliente, un atento joven menonita me llevó a la escuela primaria y me quedé asombrado de su edificio, de su organización, de su alto nivel de ética como primer concepto de educación y además les enseñan a los niños y niñas tres idiomas: español, inglés y alemán.
En esa sociedad no son aceptados los alcohólicos, los drogadictos, ni ratas, ni flojos, etc. Mi cliente se quedó asombrado cuando supo que yo no fumaba, que no era adicto al alcohol ni a las drogas, que era seguidor de las grandes culturas de los seres humanos desarrollados.
La verdad que es difícil cambiar a una sociedad acostumbrada a los malos hábitos, es decir una sociedad que fuma, que toma, que se droga, aficionada a la lujuria, al poder político y económico, al dizque prestigio social, etc.
Así es la esquizofrenia de algunos hombres, la personalidad dividida del hombre. Su casa, su sociedad, sus costumbres están divididas contra sí mismas, en consecuencia, no se puede encontrar la forma correcta de despertar al león, aunque no puede vivir en paz con el atole que le dan, sus verdugos se lo dan porque saben que le gusta.