El Diario de Nuevo Casas Grandes
Huye párroco a secta; sufre crisis mentales
Fiscalía investiga dos posibles paraderos: en su tierra natal Jalisco o con grupo "El fin del mundo" en Sonora
Nuevo Casas Grandes.- Aunque las personas cercanas al vicario parroquial de la colonia Obrera, Héctor Manuel Vergara Sánchez Aldana, se mantienen herméticas, las investigaciones de la Fiscalía General del Estado tienen dos versiones que lo ubican en su estado natal, Jalisco o en Sonora, recluido en el retiro de una secta pues se asegura, “sufre de crisis mentales”.
Sin embargo, la única pista sólida que se tiene es una menor de 16 años en Colonia Madero, catequista del vicario desaparecido y quien fue la última persona en verlo y que de hecho, asegura haberse comunicado con él posterior a su “desaparición”, pero que se ha negado de forma reacia a dar certeza a su declaración ante las autoridades, concretándose a decir que “se encuentra bien”.
Por el momento la única versión verídica con que cuenta la Fiscalía de acuerdo a sus investigaciones con feligreses que tuvieron contacto con el vicario, es que “éste se fue por su propia voluntad a bordo de su automóvil marca Toyota de la línea Rav color gris”, pero de ahí en delante sólo la menor de edad es quien tiene la información concreta de lo que sucedió después de su “desaparición”.
Incluso, la incertidumbre reina en la Diócesis de Nuevo Casas Grandes pues desde ese día 4 de mayo en que salió a oficiar una misa a colonia Madero, jamás regresó ni tuvo contacto con su congregación, lo que ha preocupado al propio Obispo quien fue el que encargó hacer oficial el caso, por lo que le encomendó al párroco titular de la iglesia “Cristo Redentor” en la colonia Obrera, Jefferson Alexander Erazo Esponoza, interponer la denuncia ante la Fiscalía General del Estado.
No obstante, la FGE apenas tuvo conocimiento de estos hechos de manera oficial a mediados de mayo y desde entonces, la Coordinadora del Distrito Galeana, Fabiola Tafoya, confirmó que se han reunido una serie de testimonios de parte de personas cercanas que lo ubican en algún lugar del estado de Sonora, en un retiro de una secta denominada “El Fin del Mundo”, pero no refieren la ciudad.
Por su parte, quien está identificado como el párroco a cargo de la iglesia “Cristo Redentor” en la colonia Obrera, Jefferson Alexander Erazo Esponoza, señala que Héctor Manuel Vergara Sánchez Aldana podría haberse regresado a su ciudad natal, en Guadalajara, Jalisco, pero no está seguro ya que el vicario parroquial sufre de “crisis mentales” y desde aquella vez que fue a Colonia Madero jamás se volvió a tener contacto con él.
Un dato que descarta un posible “levantón” o secuestro del párroco en funciones de vicario, es que éste dejó las llaves de la casa que ocupaba y sólo se llevó su automóvil sin placas y sus pertenencias, lo que indica que ya tenía la intención de irse pero extrañamente, no dio aviso a nadie y su teléfono celular no contestó nunca, que fue el motivo por el que en la Diócesis se preocuparon por él.
Asimismo, la menor de edad quien estudiaba catecismo con el aún desaparecido, se concretó a decir que “él se fue por su propia voluntad y que le llamó para decir que está bien”.
Pese a esa declaración, las autoridades de la Policía Ministerial Investigadora han requerido tener la certeza del paradero de Héctor Manuel Vergara Sánchez Aldana de 54 años, pero la catequista se ha estado negando a comparecer ni dar razón del párroco, donde incluso un familiar mayor de edad es quien contesta ahora a las autoridades y les pide que “ya no la molesten”.
Atendiendo que el vicario parroquial de la colonia Obrera está ausente desde el pasado 4 de mayo, que días después se denunció su desaparición y que las personas que “supieron de él” no han colaborado, la Fiscalía General del Estado ha acelerado las investigaciones y comenzará a hacer citatorios para requerir a declaración a los involucrados hasta dar con el paradero de Héctor Manuel Vergara Sánchez Aldana y resolver este expediente.