El Diario de Nuevo Casas Grandes
Un "bombardeo" exagerado
Buenos días señores aficionados al rey de los deportes, el béisbol.
Señores, bombardearon exageradamente al señor Aurelio Zamudio. No se midieron. Se les pasó la mano, lo que me obliga a llevar a cabo algunos recordatorios señalados en estas opiniones que han sido plasmadas en las páginas de este Diario en los días dominicales.
Para iniciar empezaré con decirles cual es y será mi intención en estas opiniones, como varios de ustedes ya lo saben que son constructivas a favor de este deporte en todos los aspectos y sin ninguna intención de ofender a nadie y con todo el debido respeto. También les he dicho que todo lo señalado en mis opiniones está apegado a lo que oigo, veo y lo vivido, o sea, en base de la realidad. Debido a esto comparte respetuosamente mi humilde opinión y naturalmente respetando la de ustedes señores aficionados.
También les he señalado con mucha frecuencia que el equipo Faraón se compone de tres partes: directiva, jugadores y afición, como también se los he señalado en esta forma: todos vamos en un barquito enfrentando las tempestades, los malos momentos sufridos a través de su recorrido, los graves daños por el bombardeo del enemigo y que en ocasiones pareciera hundirnos, pero no se rendía, y volvía al ataque para enfrentar al enemigo. Ahí estaban las tres partes trabajando en equipo como uno solo, uno para todos y todos contra el enemigo, eso es lo correcto.
Ahora permítanme comentarles sobre el ambiente que se vivió algunos años atrás por los 70´s y los 80´s, más o menos. Lo que quiero señalarles es que en ese entonces se jugaba por el amor a la camiseta y era un equipo de bajo nivel, por lo tanto se mantenía en los últimos lugares, pero pese a esto la afición los respaldaba al cien por ciento, un lleno completo, un ambiente sano con un toque familiar. En las giras se llegaron a ocupar hasta cuatro camiones y varios en muebles particulares, esa afición sabía disfrutar de las jugadas que realizaba su equipo, aunque se le hubiera derrotado. La incomodidad de las gradas de cemento y lo apretado en que se estaba, que al finalizar la entrada al pararte para estirar las piernas y al sentarte ya no cabías y había que hacerse uno delgadito y esperar el desquite en la siguiente entrada. Era más la asistencia que ahora y más tranquila.
En aquellos años surgió un personaje que causó mucha admiración a nivel estado y se trató de un Faraón que era presentado dentro de un sarcófago el cual era cargado por su séquito, todos vestidos con la indumentaria estilo egipcia. El faraón era el señor Estala más conocido como “El Sapito”, dicho con el debido respeto, y posteriormente se le conoció como El Faraón. Como porra fue reconocida como la mejor a nivel estatal y de igual forma a la afición de Nuevo Casas Grandes en algunas temporadas.
A grandes rasgos, ahí nada más superficialmente, les doy a conocer lo que ofreció el equipo Faraón y el apoyo que le brindó a su equipo, aún siendo su nivel un tanto bajo, pero que brindó muy buenas jugadas que fueron valorizadas y disfrutadas por todos los asistentes. Hasta ahí la dejamos.
Por otra parte, dejen les comento, ahí nada más brevemente, que parece ser que en algunos equipos participaron como manejadores y otros dentro de la labor técnica, todos con una trayectoria muy respetable.
Unos participaron en la Liga Mexicana, Serie del Caribe, e inclusive participaron en Grandes Ligas. Algunos en el papel de coach de picheo, otros tuvieron la dicha de disfrutar un campeonato como manejador en la Serie del Caribe, y párenle de contar, total, que estos elementos al parecer los directivos de los equipos donde participaron desistieron de sus servicios, al parecer no dieron el resultado que se esperaba siendo que traían un equipo con buena aceptación ¿qué fue lo que sucedió?, vamos a decir que fue un momento de mala suerte, porque ni modo de decir que “El Paquín” Estrada con su enorme trayectoria lo vamos a considerar como un manejador ya caduco, eso sería muy arriesgado.
Ahora, viendo la otra cara de la moneda, tenemos que al parecer el único que queda con una trayectoria similar a la de los señalados, sigue compitiendo al frente de un equipo que cuenta con un faltante de un 80 por ciento que corresponde a la acción del picheo y eso lo saben todos los equipos, y aquí retomo lo que mencioné en mi anterior opinión, no hay ni la más mínima confianza en los manejadores, porque también saben que traen buen bateo, que en cualquier momento podría surgir, sobre todo en las últimas entradas y es muy feo quedarse en el terreno, como ya lo han hecho, y precisamente se le pelea hasta que no cae el último out, el espectáculo que han ofrecido los Faraones ha estado de gran emoción, sin importar el resultado.
Por otro lado, algunos de ustedes señores aficionados, lo que desean es que se gane el juego sin importar como se hace, y si se pierde vienen las maldiciones sin analizar como se perdió y el porqué.
Ustedes son muy exigentes y se los digo con todo el respeto, aclarando que no todos, todo lo quieren a la perfección y no se puede. Para tener un buen resultado se necesita hacer bien las cosas y para eso se requiere ser adivino para acertar en todas las jugadas que se hagan y eso ustedes saben que es imposible, por lo que se seguirá jugando a los volados y rogándole a Dios que resulte favorablemente lo que se pretende, y una vez más les pido no sentencien al manejador sin formarle un juicio. En esta ocasión obraron en una forma muy drástica al pedir el despido del manejador Aurelio Zamudio a tal grado que podrían aplicarse tres agravantes que son premeditación, alevosía y ventaja. Así de ese tamaño fue su inconformidad hacia el manejador. También mencionaron que pagan por ver un buen espectáculo, pues eso es lo que están viendo y por lo visto no se han enterado y en que circunstancias se encuentra el equipo ¿ese último juego de 13 entradas contra Dorados, no les pareció bueno? ¿Hasta dónde tuvieron que llegar ambos manejadores en el manejo de sus lanzadores? Ahí, el que cometiera el error de pasarla por ahí, y ese fue el de Dorados: un doblete y un sencillo y se acabó. 13 entradas. ¿No les parece que valió la pena la desvelada?, y a propósito de desveladas, les brindo mi más sinceras felicitaciones por demostrarles y ofrecerles un apoyo a los Faraones hasta el final del evento. Eso es bonito. Estar en las buenas y en las malas, ese apoyo fortalece al jugador, de lo contrario verse solos, viene una decepción que les baja la moral y mucho más cuando se les abuchea o insulta, ¿voy bien o me regreso?
Ahora regresando un poco al comentario en relación a que pagan por ver un buen espectáculo, con esa acción tan exigente les pido que tomen en cuenta lo señalado sobre las tres partes en que se compone el equipo Faraón: directivos, jugadores y afición, o sea, ustedes.
En esto he insistido domingo tras domingo, y si uno falta se desmorona el equipo y el barquito Faraón se hunde. Ojo, aquí viene la pedrada, agáchese el que pueda: Pues resulta, estimados aficionados que ustedes con frecuencia abandonan el barco a la primera bombardeada y ahora les pregunto. ¿Cómo se le puede llamar a eso? Si pides, hay que dar.
Que no quedamos en que uno para todos y todos contra el enemigo y así debe de ser, hay que estar en las buenas y en las malas y dejar que el manejador y su equipo hagan su trabajo y dejen de ser el enemigo número dos, todo es que quieran y verán que el equipo sabrá corresponderles, se sentirán más motivados y por lo tanto más comprometidos.
En relación al ambiente que prevalece entre directivo, manejador y jugadores, les diré que hay muy buena comunicación, una buena armonía tratando de solucionar la falla lo más pronto que se pueda para dar una mejor pelea que es lo que se pretende y continuar en la lucha.
Por otra parte, dejen les comento que a estas alturas no es bueno un cambio o destitución del manejador como desean, eso lo considero un grave error, ¿por qué se los digo?, porque ya estamos en la recta final y sería iniciar una relación entre jugadores y manejador, el cual tendría que ponerse al tanto del rendimiento y conocimiento de cada jugador para poder mover sus piezas acertadamente.
Como ustedes lo piden, eso estaría difícil, el trabajo que está haciendo el señor Zamudio no es tan fácil y me estoy refiriendo exclusivamente al problema principal que es el del picheo, aparque que hay más que ustedes ignoran y que es un obstáculo que evita que se de un rendimiento más efectivo ¿cómo está saliendo adelante?, es por eso que están trabajando un equipo, echando toda la carne al asador para dar mayor rendimiento y eso con el debido respeto, ustedes señores aficionados no lo ven, por eso mi insistencia de que se profundicen más y traten de conocer más a fondo la situación del manejador y se darán cuenta que no está tan fácil, que tu análisis es ahí nomás superficial, y están ignorando los problemas internos y ni me refiero al dinero, no es por ahí como ha sucedido en otros años, ese detalle descártenlo. Podría darles más detalles, por eso mejor se los dejo de tarea, no hagan corajes que les pueden hacer mal y en peligro, Dios no lo quiera les de un infarto, pero ustedes tienen la última palabra, se van o se quedan ahí está el detalle, ya ven que como digo una cosa, digo otra, al entendedor pocas palabras.
Por lo pronto señores aficionados al rey de los deportes el béisbol… pásenla bien.