El Economista (México) - Autos
SIEMPRE EN LA PELEA
La actualización del sedán mediano de la marca japonesa dejó en el pasado el motor V6. Ahora estrena un cuatro cilindros turbo con 228 caballos de potencia.
La puesta al día de este sedán redondeó aspectos como el equipamiento y la imagen exterior. Se desechó el motor V6 para dar paso a un 2.5 litros turbo de mayor eficiencia
Luego de una larga trayectoria en el mercado, este sedán mediano se benefició de un paquete estético más fresco en el que llama la atención el refinamiento de la carrocería sin alejarse del concepto Mazda Kai que apareció en el North American Auto Show de este año. Además de la mejora visual, el equipamiento sufrió un up
grade para ponerlo en sintonía con otros de sus rivales. De esta forma y aún en la etapa media de vida de la actual generación, el sedán más grande de la firma de Hiroshima recibe un segundo aire pero sin perder las cualidades que lo tienen bien plantado entre los tres mejores de su categoría.
menos rebuscado
Los cambios para el Mazda6 apostaron por un look menos rebuscado porque desaparecieron las líneas en el cofre, se suavizaron los costados y en la parte trasera se agregó un carácter que combina deportividad con elegancia. Ya te explicaré por qué.
Como puedes ver, el Mazda6 se ve más o menos igual en el exterior, por lo que es necesario afinar la vista y poner atención a los puntos clave del vehículo. La parte delantera se ha rediseñado sutilmente, pero a menos que el nuevo automóvil esté estacionado junto al anterior, las modificaciones serán realmente claras y notorias.
Lo primero que debemos observar es el cambio en el estilo de la parrilla corporativa porque en primer lugar el logotipo creció haciéndose más notorio. Además, el interior de la misma ahora adopta un efecto tridimensional gracias a las formas de la malla, un detalle que se acrecenta en el paquete Signature porque se agrega un acabado cromado. Esto provoca que el reflejo de la luz permita darle un mayor volumen.
Para los paquetes iSport, iGrand Touring e iGrand Touring Plus, todo se queda en el color negro del plástico. El marco de la parrilla mantiene la aplicación de aluminio cepillado, sólo que en esta ocasión el contorno es más grueso y se extiende hacia los faros principales.
El conjunto óptico es el segundo punto de atención. Verdaderamente hay que tomarse su tiempo para percatarse de que los faros son más estilizados, una característica obligada porque el cofre se extiende sobre ellos. Claro que el tipo de iluminación (que variaría de acuerdo con el paquete que se elija) le hace ganar presencia. Para el nivel Signature, la tecnología Led premia a su imagen como el auto más importante para la marca japonesa.
Por último, la fascia tiene una solución menos complicada porque no hay líneas rebuscadas; por el contrario, sólo recurre a unos embellecedores cromados justo al ras de cada esquina.
Por los costados no hay mucho qué decir. No se alteraron el acento presente en las salpicaderas del modelo pasado ni tampoco la línea curva que enfatiza el área de pasajeros. Salvo los nuevos rines de 19” para el Signature, no hay cambios importantes. Las ventanillas no abandonaron el filo cromado que las redondea.
La parte trasera va en sintonía con la delantera al recibir mayores modificaciones
pero aun así hay que agudizar la vista para identificarlas. Las calaveras también fueron rediseñadas aunque muy ligeramente. La nota más relevante es la incorporación de una franja cromada que va sobre la placa y que llega hasta las luces posteriores, dándole un marco más actual.
De la fascia sólo hay que decir que alberga dos salidas de escape cromadas que están más cerca de los bordes, lo que da el efecto de tratarse de un auto más ancho.
MÁS EQUIPO
En los pisos de venta, uno de los factores decisivos al momento de la compra es el nivel de equipamiento. Además del sistema de sonido (que debe estar a la altura del precio a pagar) están las herramientas de conectividad que nos permitan explotar las funciones de nuestro teléfono inteligente.
Por ello el Mazda6 incorpora en todas las versiones una pantalla de 8” a color desde la que se controlan apartados como la telefonía, el sistema de sonido, así como las herramientas de seguridad disponibles en la versión Signature. La marca informó que en unos meses los clientes que adquieran el Mazda6 2019 podrán acudir al distribuidor para que su auto reciba una actualización y poder contar con las interfaces de Apple Car Play y Android Auto. El sistema Mazda Connect está en todos los paquetes con bondades como los controles en el volante para el audio y la telefonía, el sistema de sonido HD o las entradas USB y Aux. Del nivel Signature son exclusivos el sistema de sonido Bose HD con AudioPilot y el Centerpoint con 11 altavoces que crea una atmósfera de confort y entretenimiento de primer nivel.
El estilo del tablero mantiene su sobrie- dad, claridad de instrumentos y mejoras en cuanto a aditamentos premium. La versión más alta ofrece reglajes eléctricos para los asientos delanteros con calefacción y ventilación, así como memorias de posición. Un cambio importante en el enfoque de diseño para los asientos es la incorporación de un acolchado más grueso y cojines de asiento más anchos, que dan un soporte más cómodo. Además, los materiales plásticos se mantienen al mínimo, con el uso ampliado de la piel nappa, materiales de gamuza y madera Senwood real para la versión Signature. El conjunto para el paquete Signature de verdad es recalcable por la aplicación de materiales que bien podrían encontrarse en los segmentos más altos del mercado.
El clúster de instrumentos puede ser análogo o digital; para el Signature hay un display de 7” sobre el velocímetro que por esta razón es totalmente digital. Gracias a ellos podemos visualizar la información de la computadora de viaje como el consumo en tiempo real o parcial.
La versión de entrada tiene tela, le sigue la piel para los paquetes iGrand Touring e iGrandTouring Plus, mientras que la piel nappa sólo está disponible en el nivel Signature.
ADIÓS V6
En esta actualización Mazda apostó por la eficiencia, por lo que el tren motor con el V6 quedó en el ayer. Ahora todas las versiones cuentan con un 4 cilindros con 2.5 litros de desplazamiento pero con enormes diferencias.
La primera opción corresponde a una alimentación atmosférica en la que el motor desarrolla 188 caballos de potencia y un torque de 186 lb – pie, cifras ya conocidas en la gama Mazda.
Para la versión Signature este mismo motor se beneficia de la alimentación turbocargada que desarrolla 228 caballos de potencia y 310 libras de par motor. Para este motor la compresión se disminuyó de 13.0:01 a 10.5:1, lo que explica la ganancia de potencia.
Todas las versiones tienen una transmisión automática que la marca define como SkyActiv-Drive con seis marchas.
CHASIS DE VANGUARDIA
El chasis, que es de serie en todos los paquetes, cuenta con un sistema de suspensión mejorado, que se traduce en menores ruidos hacia el interior, mayor confort y un aumento en la estabilidad. Esto lo pude comprobar en este primer contacto en el que manejé por algo así como 200 kilómetros. A velocidad sostenida de 140 km/h no hay ruidos molestos que compliquen el escuchar música o platicar con acompañantes. Al volante es fácil comprobar la mejora en el dinamismo, la estabilidad en el paso por curvas, así como en la confianza por circular a mayores ritmos de velocidad.
En el apartado de seguridad nos encontramos con anclaje para silla de bebé en asiento trasero (LATCH), Monitoreo de presión de llantas para todas las versiones, Sistema de alerta de tráfico trasero, Sistema de monitoreo de punto ciego a partir de la versión iGrand Touring, Sistema de control de luces de carretera, Sistema de monitoreo de cambio de carril y Sistema de monitoreo de mantenimiento de carril para la versión Signature. Con este último se experimenta una retroalimentación en el volante así como una alerta visual en el clúster de instrumentos.