El Economista (México)

Las quejas de

- Alberto Aguirre

Elba Esther Gordillo Morales, ¿presunta culpable? La mayoría de los ministros de la Primera Sala de la Suprema Corte votó contra la propuesta de José Ramón Cossío Díaz de atraer al máximo tribunal la petición de la expresiden­ta del SNTE de prisión preventiva domiciliar­ia, la cual le había sido negada por razones de edad.

A partir de las quejas de Elba Esther Gordillo Morales, el ministro Cossío emplazaría a definir un criterio sobre la reclusión de los adultos mayores inculpados, dentro de un proceso penal. En las materias civiles y familiares, la Primera Sala ya resolvió que al ser un grupo vulnerable, merece una especial protección por parte de los órganos del Estado.

El Código Penal concede la prisión preventiva domiciliar­ia a partir de los 70 años, mientras que la Ley de los Derechos de las Personas Adultas Mayores considera que esa calidad se entenderá a partir de los 60 años o más. Pero los ministros considerar­on que el caso Gordillo no cumple con las condicione­s de importanci­a ni trascenden­cia para el orden jurídico nacional, contrario a la propuesta del ministro Cossío. El expediente tendrá que ser resuelto por el Tribunal Colegiado.

En vísperas del fallo de los ministros de la Primera Sala de la SCJN el equipo jurídico de la ex lideresa magisteria­l activó una estrategia mediática que podría habérseles revertido. El abogado jalisciens­e Marco Antonio del Toro Carazo acusó a la PGR de actuar con malicia procesal contra Gordillo Morales.

Un experiment­o ad hoc que trató de replicarse para otros casos de alto impacto. Al menos, en el caso del exgobernad­or de Sonora Guillermo Padrés, quien, de acuerdo con sus defensores, también enfrenta cargos por defraudaci­ón fiscal por haber consignado­ingresos acumulable­s menores a los que obtuvo.

El 2 de octubre del 2015 Gordillo Morales recibió el auto de formal prisión tras de ser hallada presunta responsabl­e de defraudaci­ón fiscal equiparabl­e por el juez Julio Serna Velázquez, en la causa penal 66/2015, desahogada en el Juzgado Séptimo de Distrito de Procesos Penales Federales del Reclusorio Sur.

Y es que en el ejercicio fiscal 2009 la entonces presidenta del SNTE habría reportado ingresos acumulable­s menores a los que realmente obtuvo así como omitido el pago de 4.4 millones del Impuesto sobre la Renta. El juez segundo de Distrito de Amparo en Materia Penal le negó la protección constituci­onal y, entonces, la defensa de la Maestra acudió al Tribunal Colegiado. Del Toro Carazo insiste en que cuenta con las pruebas fehaciente­s para acreditar que los depósitos realizados por la tesorería del SNTE a las cuentas bancarias de la Maestra correspond­en con gastos de representa­ción y que el SAT no le ha concedido créditos fiscales.

Lo cierto es que la sentencia -cuya versión tencia emitida mente, VERDADES. Justo se cumplen seis meses del operativo gubernamen­tal que marcó un hito en este sexenio: el presidente Enrique Peña Nieto -tras de una reunión de alto nivel en la que participar­on media docena de integrante­s del gabinete y el staff de Los Pinos, para analizar el proceso electoral de Estados Unidos- instruyó que hubiera un acercamien­to con Hillary Clinton y Donald Trump. Claudia Ruíz Massieu fue comisionad­a a trabajar con el Partido Demócrata, para lo cual sostuvo reuniones con Jeh Johnson, Edmund G. Brown Junior y Tim Kaine, sin descuidar la relación con los republican­os, a través del speaker de la Cámara baja, Paul Ryan. Por su parte, Luis Videgaray quedó encargado de tender puentes con el equipo del magnate. Ruiz Massieu sostuvo más de 200 reuniones y realizó 35 giras a la Unión Americana, mientras Videgaray Caso contactóa empresario­s, familiares y amigos del candidato republican­o, quien en una jugada audaz aceptó la invitación para reunirse con el presidente mexicano. El manejo desastroso de la comunicaci­ón gubernamen­tal y el fuego amigo ocasionaro­n la salida del secretario de Hacienda del gabinete, a quien ahora sólo resta explotar su nexo y cercanía con el equipo de Trump, mientras que Ruiz Massieu seguirá con su estrategia de reforzar la relación con el Congreso y los principale­s diplomátic­os de aquel país. La duda ahora es qué posición y desde dónde aprovechar­án los contactos que consolidó Videgaray. La respuesta es inminente.

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