BARACK OBAMA DA SU ÚLTIMO DISCURSO EN GRECIA “La globalización necesita un cambio de rumbo”
Por tercera ocasión, el mandatario estadounidense llama a dejar de lado las divisiones y el rencor entre las comunidades del mundo
Atenas. EN UN discurso dirigido a una audiencia global, así como a los estadounidenses en el país, el presidente Obama dijo el miércoles que “la trayectoria actual de la globalización necesita un cambio de rumbo”, así como también argumentó sobre que no hay vuelta atrás en un mundo interconectado.
“En los próximos años, y décadas, nuestros países tienen que asegurarse de que los beneficios de una economía global integrada son compartidos más ampliamente por más personas y los impactos negativos son confrontados directamente”, dijo.
Con su discurso, pronunciado ante una multitud en el recién inaugurado Centro Cultural de la Fundación Stavros Niarchos, por tercera ocasión, en dos días, Obama trataba de tranquilizar a sus aliados europeos y del mundo ante el descontento político mostrado a raíz del triunfo de Donald Trump.
El martes por la noche, opositores a la globalización se enfrentaron con la policía durante algunas protestas en Atenas.
Como homenaje al papel de Grecia como cuna de la democracia, el presidente provocó risas cuando dijo que era esencial defender los ideales como la libertad de expresión, religión y “elecciones libres y justas, porque los ciudadanos deben ser capaces de elegir sus propios líderes, incluso si su candidato no siempre gana”.
Reducir la desigualdad, dijo, “crea sociedades en las que es menos probable que las personas se vuelvan unas contra otras, menos probable que sean atraídas a fuerzas oscuras” de la división y el rencor.
Con la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos desnudando las frustraciones y la insatisfacción en el país, Obama dijo que el impulso “para retirarse de un mundo globalizado es comprensible”, pero destacó: “No podemos mirar atrás en busca de respuestas, tenemos que mirar adelante”.
“No podemos cortar las conexiones que han permitido tanto progreso”, dijo Obama en un discurso al pueblo griego al concluir la primera etapa de su última gira por el exterior como presidente.
Antes de la victoria de Trump, el discurso de Obama a los griegos había sido visto como un momento de culminación de su presidencia antes de entregar las riendas a la demócrata Hillary Clinton. En lugar de ello, el legado de Obama queda en dudas, con Trump preparado para asumir el poder con planes de deshacer gran parte de la agenda de su predecesor.
Obama habló en defensa de sus logros: un acuerdo nuclear con Irán, un pacto climático global, el restablecimiento de relaciones con Cuba y otros pasos.
“El próximo presidente estadounidense no pudiera ser más diferente”, dijo Obama. Pero agregó: “La democracia es más grande que una persona”. Reiteró además su voluntad de asegurar una transición pacífica, pese a sus diferencias con Trump.
En su último día en Grecia, Obama visitó la Acrópolis de Atenas, el conjunto monumental más famoso del país.
El gobierno griego ha celebrado como un evento de gran importancia la visita de Obama, el primer viaje oficial de un presidente estadounidense en el cargo desde que Bill Clinton acudió en 1999.
Atenas confiaba en que el mandatario pudiera persuadir a algunos de los acreedores internacionales más reacios del endeudado país a conceder una reestructuración, así como a presionar a otros países europeos para que asuman más de la carga de la crisis de refugiados que aqueja al continente.
Los líderes mundiales prestan una gran atención a las palabras de Obama y ven paralelismos entre la elección de Trump y el auge de los movimientos populistas y de ultraderecha en sus propios países ante una continuada ansiedad económica.
El mandatario estadounidense partió seguidamente hacia Alemania para aterrizar el miércoles en Berlín. Sostuvo una cena privada con la canciller alemana, Angela Merkel; los dos líderes tomaron una posición conjunta a favor de la globalización, el libre comercio y la lucha contra el cambio climático, según un artículo de opinión conjunto que parecía ir contra la agenda de campaña de Donald Trump. También elogiaron a la OTAN —Trump ha señalado que el país tendrá un compromiso menos firme con la alianza durante su mandato— como vital para el mantenimiento de la seguridad y la estabilidad en la región.
También hicieron hincapié en la necesidad de seguir adelante con el Acuerdo de París, sobre el cambio climático que busca reducir las emisiones de efecto invernadero, del cual Trump ha dicho que planea retirarse.