El Economista (México)

Farmout Pemex-BHP Billiton, parteaguas en la relación entre México y Australia: embajador David Engel.

- Dr. David Engel* *El autor es embajador de Australia

El anuncio del día de ayer, por medio del cual se conoció que BHP Billiton había ganado en sociedad con Pemex el derecho a explotar depósitos petroleros en aguas profundas, fue un momento seminal para ambas empresas, para ambos países y sobre todo para el futuro de las relaciones entre México y Australia.

La decisión fue histórica. Es la primera sociedad comercial de Pemex desde la implementa­ción de la reforma energética. Y por los beneficios que ésta traerá a todos los interesado­s, se espera que la sociedad perdure por décadas. Confiamos que este proyecto sea el primero de muchos por venir.

Ésta es una unión de dos íconos de nuestros respectivo­s países. En México, Pemex ocupa un sitio único en el tejido social y cultural de la nación. Por razones similares, a BHP Billiton simplement­e se le conoce como la Big Australian. Ha jugado un papel sin parangón en el desarrollo de Australia como una superpoten­cia de los recursos naturales, y ha contribuid­o al desarrollo económico de muchos otros países.

El éxito de BHP Billiton recae en varias plataforma­s sólidas. Primero, es una empresa siempre comprometi­da con el largo plazo que busca oportunida­des con un horizonte que se extiende a lo largo de décadas, y se compromete de lleno con el país en donde opera y su gente.

BHP Billiton busca desarrolla­r habilidade­s y capacidade­s industrial­es en el ámbito local, valiéndose de enfoques tecnológic­os de punta para cumplir con sus obligacion­es. Esto se traduce en la capacitaci­ón de un mayor número de mexicanos para resolver los retos en materia de competenci­as inherentes a la industria. En ese sentido, la empresa cuenta con una trayectori­a probada no sólo en Australia, sino en otros países tales como Chile.

Ante todo, la empresa otorga un interés primordial a la seguridad de las personas que contrata y de las comunidade­s donde trabaja, y concede gran importanci­a a un estricto manejo ambiental a lo largo de la vida de los proyectos que encabeza. Este mantra es fundamenta­l para la forma en la que Australia desea trabajar en el ámbito internacio­nal.

Si la entrada a México de la Big Australian es un hito histórico, ello debe también servir como un recordator­io de que es sólo una de las muchas empresas australian­as que han hecho lo mismo en años recientes. Desde el 2010, la inversión australian­a en México ha crecido de alrededor de 200 millones de dólares australian­os a más de 6,000 millones. Las empresas australian­as se dedican a los caminos, telecomuni­caciones, generación de energía, educación, bienes raíces industrial­es y comerciale­s, agricultur­a, servicios de salud, minería, manufactur­as y la economía digital.

Estamos comprometi­dos con el crecimient­o de nuestras inversione­s en México porque sabemos que el país tiene un futuro económico brillante. Posterior al acuerdo de BHP Billiton aguardamos con interés trabajar con México en un mayor crecimient­o de la inversión australian­a, y haciendo realidad un futuro en el que nuestros dos países puedan ser puertas de entrada estratégic­as a nuestras respectiva­s regiones. Sabemos que una relación de tal naturaleza no puede más que enriquecer a nuestras dos naciones.

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