México avanza como ciudad resiliente
LOGRÓ NUEVA ALIANZA DE COOPERACIÓN CON EL C40 La organización 100 Ciudades Resilientes (100RC) ofrece soluciones de financiamiento para implementar proyectos de adaptación
DURANTE LA Cumbre Mundial de Alcaldes del C40, que recién se llevó a cabo en la Ciudad de México, se logró una nueva alianza de cooperación entre la organización 100 Ciudades Resilientes (100RC), patrocinada por la Fundación Rockefeller y el Grupo de Liderazgo C40.
“El propósito de estas reuniones es crear una agenda muy local, independientemente de lo que puedan hacer los países y sus compromisos, cada ciudad puede hacer una diferencia, y sumadas las 90 ciudades que aquí participan,el resultado es mucho mayor”, explicó en entrevista Eugene Zapata, director regional de 100 Ciudades Resilientes.
Se trata de ofrecer distintas herramientas a las ciudades, como soluciones de financiamiento para implementar proyectos de adaptación, facilidades para propiciar el intercambio entre ciudades, apoyo a las ciudades que estén desarrollando e implementando planes de resiliencia, adaptación y mitigación del cambio climático, entre otras.
La resiliencia, muy presente en el siglo XXI, es el proceso de adaptarse bien a la adversidad, amenaza, o fuentes de tensión significativas; por ello, y ante el potencial global que tienen las ciudades para atender los problemas climatológicos, este proyecto representa un modelo, que se espera se replique en muchas ciudades.
“Lo que estamos viendo es que hay dos grandes desafíos: primero, dejar de ver los problemas de las ciudades con un enfoque sectorial; normalmente los gobiernos están divididos por secretarías con su propio plan de trabajo, lo que se quiere es borrar estas fronteras y crear un gran proyecto que abarque a la cultura, al medio ambiente, a la equidad social, entre otros aspectos que incluyen el desarrollo urbano.
“Por otro lado, se trata de romper con la poca capacidad de planeación a largo plazo; sabemos que los mandatos de los políticos están acotados en el tiempo y se quieren resolver los problemas en un corto tiempo, en este sentido queremos demostrar que no podemos resolver problemas de la envergadura del cambio climático, o fenómenos meteorológicos, con procesos tan cortos”, explicó.
Dijo que no se trata de sólo ofrecer apoyos o fondos a las ciudades desde el punto de vista caritativo, “nosotros nos consideramos socios de alcaldes y gobernantes con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas”.
Las ciudades líderes que participaron en la Cumbre Mundial de Alcaldes del C40 representan más de 600 millones de personas y 25% del Producto Interno Bruto mundial.
ALGUNOS EJEMPLOS
Zapata aseguró que ya tenemos ciudades que han creado una oficina de resiliencia, por ejemplo, en Río de Janeiro, Brasil, se acaba de anunciar la institucionalización de un área en el gobierno municipal llamada bio-resiliente; también hay iniciativas muy ambiciosas en ciudades como Panamá, que incluso antes de este proyecto creó un comité de resiliencia local que incluye al sector privado, a la sociedad civil, la academia y líderes de opinión para pensar la ciudad desde distintos aspectos.
En México se trabaja con el gobierno de la Ciudad de México, el de Ciudad Juárez en Chihuahua, el gobierno municipal de Colima y con el área metropolitana de Guadalajara; además, Sedatu ha lanzado una Red Mexicana de Ciudades Resilientes y se está buscando que los modelos de las cuatro ciudades mencionadas sean replicados en todo el país.
La Ciudad de México es la más adelantada y la primera que fue aceptada, “ya tiene publicada una estrategia de resiliencia, una oficina en vigor y estamos en proceso de (ver) cómo esta institución pueda garantizar su permanencia; además, sabemos de proyectos ya identificados en tema de agua y transporte sustentable”.
El futuro de las ciudades es una apuesta para el futuro de la humanidad y tenemos que aprender a convivir y participar”.
En este proyecto, más de 1,000 ciudades se postularon pero sólo 100 fueron escogidas, “ellas ratificaron un compromiso político del más alto nivel de por lo menos hacer tres cosas: cambiar su organigrama y su manera de planear a un enfoque más resiliente y crear una oficina con tal fin; dos, crear una estrategia de resiliencia plurisectorial y luego escoger proyectos prioritarios y llevarlos a la práctica”, expresó.
Por último, el director del proyecto aseguró que el tema de las ciudades y el enfoque resiliente no es un asunto exclusivo de los gobiernos, “en este caso la ciudadanía es igual o más importante para algunos temas y viceversa, el futuro de las ciudades es una apuesta para el futuro de la humanidad y tenemos que aprender a convivir y participar, junto con la respuesta del gobierno, además se rompe con la planeación de arribaabajo y se hace un enfoque más horizontal”, concluyó.
Eugene Zapata, director regional 100RC.