Peña Nieto asistió al informe del ministro presidente de la SCJN, Luis María Aguilar.
HAY PROTOCOLOS, DEFIENDE
PARA LOS integrantes del Poder Judicial de la Federación (PJF) es grave que a casi dos meses del asesinato del juez quinto de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales, Vicente Antonio Bermúdez Zacarías, en el Estado de México, no haya concluido la investigación, no exista móvil, como tampoco ubicación del autor intelectual del crimen, manifestó ayer el ministro-presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), Luis María Aguilar Morales.
Al rendir el informe de labores, el representante del máximo tribunal de justicia del país dijo que el PJF cuenta con protocolos y sistemas previstos para proporcionar a los juzgadores protección para ellos y en algunos casos, para sus familias.
“Esto no es novedad porque el PJF tiene ya varios años de implementar un protocolo, no estamos sólo reaccionando a un evento en particular, ni mucho menos hasta ahora”, porque ninguna agresión puede, ni de lejos, ser aceptada ni tolerada, mucho menos el homicidio, pero confío en que las autoridades competentes que realizan la investigación den resultados.
“Tengo entendido que no han concluido todavía las indagatorias de quién es el autor intelectual de este delito y tampoco el móvil que lo generó, me parece agraviante para la víctima, su familia y para la verdad que se especule con ello y se afirme lo que no se ha demostrado” y solicitó, no generar un ambiente de temor injustificado a los juzgadores o familias, que se conviertan en un lastre en su libertad y tranquilidad para juzgar.
Recordó que actualmente a 79 juzgadores, entre jueces de Distrito y magistrados de circuito, se les ha dotado de seguridad especial, “cuentan con vehículos blindados, escoltas, chalecos protectores, radios de comunicación, un seguimiento cercano y “desde luego, si pudiera hacer más lo haremos, daremos esa protección, dentro de los protocolos que existen, siempre que nos lo digan y comprobemos realmente que lo requieren”.
El ministro rechazó que la violencia contra los jueces o personal del PJF sea cotidiano o continuo, y aseveró que el homicidio del juez Bermúdez Zacarías es un caso excepcional, no por menos indignante o terrible, sí aislado, por tanto garantizar seguridad, para eso se cuenta con apoyo estratégico y operativo de las Secretarías de Gobernación, Defensa Nacional, Marina Armada y Policía Federal.
Además de personal de seguridad y sistemas de vigilancia con cámaras de circuito cerrado en todas las instalaciones, que van de la mano con quienes actúan con responsabilidad ante las amenazas y toman medidas necesarias para garantizar la integridad de todo el personal y del público usuario que acude a las instalaciones del PJF, esto no sólo en la Ciudad de México, sino en todas las entidades de la República.
Tengo entendido que no han concluido todavía las indagatorias de quién es el autor intelectual de este delito y tampoco el móvil que lo generó”.
Luis María Aguilar, presidente de la SCJN y el CJF.