Ingresos públicos más recargados en tributarios abren oportunidad de reducir dispendios, dice la firma en México
LA CAÍDA de los ingresos petroleros y la necesidad del gobierno de apoyarse cada vez más en los tributarios abre un espacio para que los ciudadanos ejerzan presión en la rendición de cuentas sobre los recursos que les confieren, advierte Ricardo Fuentes Nieva, director de Oxfam México.
“En el 2017 habrá mucha presión en México sobre el gobierno federal para que elimine los privilegios que prevalecen sobre los gobiernos estatales, para que haya más presencia ciudadana en las innovaciones institucionales como el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), para que utilicen los recursos conferidos para beneficios de la comunidad”, dice.
Entrevistado por El Economista, explica que en el país, la desigualdad es producto de los privilegios políticos, la corrupción y un sistema añejo que permite la concentración de la riquez y los privilegios en unos cuantos.
Asimismo, observa que en México el problema se ha vuelto más crítico, ante la desconexión que tiene el gobierno federal de la realidad nacional.
“La tensión social que vemos en las calles por el aumento del precio de las gasolinas los tendría que obligar a escuchar y ahora que lo están haciendo, empujar temas como el SNA, para que, de forma autónoma, puedan funcionar como un instrumento para limitar la posibilidad de que los políticos puedan robar con impunidad”.
DESIGUALDAD Y LENTO CRECIMIENTO
El directivo advierte que están por actualizar el reporte sobre desigualdad extrema en México, que fue divulgado en el 2015. Ahí, quedó expuesto que a pesar de ser la 14 economía del planeta, teníamos a 53.3 millones de personas viviendo en pobreza.
Tal como lo indica aquel reporte de Oxfam México, dirigido por Gerardo Esquivel, basándose también en el Global Health Report 2014 de Credit Suisse, “el 10 % más rico de México concentraba 64.4% del total de la riqueza del país”.
A esta evidencia hay que agregar la corrupción y desvíos de recursos que han caracterizado a la cúpula de la administración pública en sus más altos niveles, dijo, lo que claramente ha ido en detrimento de la capacidad de las políticas públicas para ayudar a la gente de menos recursos.
“El dispendio de los recursos públicos va en contra de los más pobres. Los 35,000 millones de pesos perdidos en Veracruz, implican menos gasto social en beneficio de unos políticos corruptos”, asevera.
El directivo confía en que la participación de Oxfam Internacional en el Foro de Davos permita un avance en la reducción de la desigualdad, al sensibilizarles del impacto que sí tiene el hecho de que en un país como México, cohabiten uno de los hombres más ricos del mundo, y una mujer que en la sierra de Puebla, bebe agua caliente para apaciguar su hambre por dos días que lleva sin comer.