Aeroméxico incrementará su conectividad con Europa
La oferta del grupo será fortalecida en el primer semestre del año al utilizar sus nuevos aviones Boeing 787 como respuesta a lo atractivo que se está convirtiendo México en turismo de negocios.
GRUPO AEROMÉXICO incrementará en el primer semestre de este año su oferta de conectividad con Europa y ofrecerá una “mejor experiencia de viaje” a sus pasajeros utilizando sus nuevos aviones Boeing 787 Dreamliner como respuesta a lo atractivo que se está convirtiendo México, principalmente en el turismo de negocios, comentó su director corporativo de Ventas, Jorge Goytortua.
En tanto, España a partir de mayo pasará de nueve a 12 las frecuencias semanales, Londres subirá de seis a siete y en Holanda se buscará un vuelo diario, que al cierre del 2017 representará un crecimiento de 28% en asientos hacia esos destinos, a los que se suma Francia.
“Estamos contentos de haber podido anunciar la expansión que tendremos este año en el mercado europeo, en particular en el mercado español, donde esteramos creciendo hasta 40% el número de frecuencias y complementando con un mejor producto”, dijo el directivo, en entrevista enmarcada en la Fitur 2017.
En el caso de la ruta México-Madrid, dijo, ha tenido buena aceptación que se utilice el nuevo Dreamliner 7879, el que fue bautizado con el nombre de Quetzalcóatl, está decorado con iconografías mexicanas y “es el más moderno del mundo.
En relación con los (espacios de despegue y aterrizaje) que utilizará Aeroméxico para las nuevas operaciones saliendo del saturado Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, explicó:
“Es algo que teníamos considerado. Es importante mencionar que los vuelos adicionales del mercado europeo son vuelos nocturnos. Entran a las horas disponibles en el aeropuerto”, explicó.
El directivo de Aeroméxico también destacó que trabajan en línea con la apuesta de la Secretaría de Turismo de diversificar la oferta de países emisores de viajeros a México, estimulando mercados que estuvieron “estancados” por muchos años, como Londres, que tenía cuatro vuelos semanales antes de que ellos llegaran. (Alejandro de la Rosa/ Enviado)