Visita incómoda de Angela Merkel
Ankara. LA CANCILLER alemana, Angela Merkel, pidió al presidente turco Recep Tayyip Erdogan que garantice el respeto de la libertad de expresión en Turquía, a pocas semanas de un referéndum sobre una revisión constitucional que reforzaría los poderes del turco.
Merkel, que viajó a Turquía por primera vez después del fallido golpe de Estado de julio, afirmó haber “hablado largo y tendido sobre la libertad de los periodistas” con Erdogan, y lamentó las dificultades que encuentran los corresponsales alemanes para obtener la acreditación de prensa turca.
Los dirigentes turcos llamaron por su parte a Berlín a extraditar a los presuntos golpistas que huyeron a Alemania, un tema que envenena las relaciones entre los dos países.
Las relaciones entre Turquía y Alemania, dos pilares de la OTAN, se degradaron después del intento de golpe de estado contra Recep Tayyip Erdogan, que tras el fracaso procedió a una purga en los servicios públicos, la justicia y las Fuerzas Armadas que causa preocupación en Europa.
Por este viaje, Merkel fue muy criticada en Alemania y por la oposición en Turquía.
“He hecho hincapié en que la separación de poderes y la libertad de expresión deben ser garantizadas” en la revisión constitucional impulsada por Erdogan, declaró Merkel en una rueda de prensa conjunta en el palacio presidencial.
“INTERÉS MUTUO”
Por su parte, el jefe de Estado turco no dudó en corregir a la canciller alemana cuando ésta utilizó el término “terrorismo islamista”.
“No lo utilicemos, por favor, porque mientras sea así, estaremos obligados a oponernos. Si nos quedáramos en silencio, sería como aceptarlo. Y yo, como musulmán, y como presidente musulmán, no puedo aceptarlo”, prosiguió.