Alexander Shorokhoff abre miniboutique en México
Fabricará 25 nuevas piezas de reloj únicas, con tourbillon y horario saltante, que se integrarán a la colección que oferta en nuestro país
Obras de arte, únicas, irrepetibles, de alta precisión, de fabricación artesanal y grabados a mano son las virtudes técnicas de los relojes que integrarán la colección de la miniboutique que Alexander Shorokhoff abre en México y con la cual celebra el 25 aniversario de su marca.
A esta colección relojera de alta gama se integrarán las 25 piezas únicas que Alexander Shorokhoff fabricará en el 2017 y que formarán parte de la conmemoración de sus 25 años de competir en el mercado global de relojes de alta precisión.
“Se fabricarán 25 piezas únicas en el mundo con mecanismos de reloj complejos: tourbillon y horas saltantes. Se producirán en total 25 modelos nuevos, irrepetibles y todos estarán grabados a mano”, manifestó.
La aceptación excepcional que esta marca ha tenido en el mercado mexicano se refleja en la adquisición de hasta seis relojes por cliente, quienes son atraídos por su calidad y precio inmejorable, un signo comercial que inspiró a Alexander Shorokhoff para abrir una miniboutique en la avenida más exclusiva de la Ciudad de México, en la colonia Polanco, y que ya piensa en replicar en otras ciudades de nuestro país.
Su precio-conveniencia es el secreto del éxito comercial de esta relojera alemana. Shorokhoff advierte que el consumidor los adquiere porque observa que el precio de estos re- lojes representa la tercera parte del valor que oferta la competencia: “Compra dos o tres relojes por el mismo precio”.
Así, la adquisición de estos relojes-arte se ha convertido en una inversión, pues a futuro, lejos de perder valor, éste se incrementa. Un fenómeno de mercado donde los relojes usados “van subiendo de precio”, pues al agotarse las existencias los clientes recurren a la compra de piezas usadas”.
Además del precio que distingue a la marca Alexander Shorokoff en un mercado donde participan las grandes relojeras, fabricarlos a la medida del cliente es otra distinción única: personaliza el producto. “El cliente puede pedir su propio reloj, con cierto mecanismo”.
Alexander Shorokhoff mencionó que otro diferenciador con la competencia es la complejidad de los mecanismos, grabados, carátulas y personalización de las piezas, hechas a mano y fabricadas por él. Destaca el diseño único del tourbillon, así como la tipografía de los números, el acomodo de las manecillas en sus relojes, algo que no existe en el mercado, pues “nadie los puede hacer por este precio”.
La calidad suprema de los relojes Shorokhoff se sustenta con el grabado a mano, una técnica artesanal de 200 años de antigüedad que se utiliza en cada proceso: mecanismo, grabado, calibración, precisión, y del cual expide un certificado de calidad, que asegura que fue hecho con alto detalle y un control estricto de cada proceso.
Alexander Shorokhoff lanzará en México su miniboutique el próximo 23 de marzo, una marca que en el 2016 fue distinguida en Alemania como el mejor diseño, premio que refrenda este 2017. Prepara ya dos diseños especiales para el mercado mexicano.